El teniente fiscal del Tribunal Supremo, Luis Navajas, se ha defendido de las críticas contra el informe en el que solicitó el archivo de las querellas presentadas contra el Gobierno por la gestión de la crisis del coronavirus. En una entrevista en 'Onda Cero' ha revelado que dos fiscales quisieron "influir" en su decisión, con el objetivo de que admitiese las denuncias.
La semana pasada, el teniente fiscal del Tribunal Supremo, Luis Navajas, solicitó el archivo de las 21 querellas presentadas contra el Gobierno de Pedro Sánchez por la gestión de la crisis sanitaria. Esta decisión le valió las críticas de quienes consideran que la Fiscalía "salió al rescate" del Ejecutivo e incluso, dos fiscales "contaminados ideológicamente" intentaron influir para evitar el rechazo a las querellas. Navajas ha confirmado la identidad de uno de estos dos compañeros: Consuelo Madrigal, la ex fiscal General del Estado.
"Con esa tropa no podía entrar a debatir"
"Son fiscales de altísima consideración pero en este sentido están contaminados ideológicamente", ha revelado Navajas, que ha añadido que en ese momento fue consciente de que "con esa tropa no podía entrar a debatir a que me dieran su consejo", por lo que no convocó la Junta de Fiscales para tomar la decisión.
El fiscal ha afirmado que no convocó la Junta "porque habría tenido que excluir a algunos compañeros, magníficos juristas, pero esclavos de su ideología es este caso, dos juristas de lo penal, que en el mes de mayo, cuando acudieron a mi despacho intentaron influenciarme en el fondo de este asunto". Además, ha señalado que no reunió a la Junta de Fiscales para evitar "filtraciones".
Navajas ha defendido el informe en el que solicita el archivo de las querellas y ha aseverado que no ha habido intervención alguna de la Fiscal General del Estado, Dolores Delgado, ex ministra de Justicia de Pedro Sánchez.
"Los que dicen que es un informe impreciso, insostenible y de mal abogado... el Supremo nos va a poner a cada uno en su lugar", ha afirmado, antes de insistir en que no respalda la acción del Gobierno, sino que considera que no se le pueden atribuir los delitos de homicidio o de lesiones que les imputan algunos de los querellantes, entre ellos, Vox.