Rafael Spottorno: ¡tarde piaste pajarito!

Rafael Spottorno, el ex jefe de la Casa Real, ha tardado demasiado tiempo en realizar lo que el martes a la noche hizo ante Felipe VI: dimitir de su cargo de asesor del Rey con el argumento de que esta bronca "puede afectar al prestigio de la Corona" a cuenta de su utilización de las tarjetas opacas. ¿Sí? ¿Y cómo le puede afectar?. Sería bueno nos lo dijera.

Este señor, diplomático él, fue segundo de la Casa Real con Juan Carlos de 1993 al año 2002. Casi diez años. ¡Lo que no habrá hecho y lo que no habrá encubierto de su dilecto Jefe!

Posteriormente lo fue, pero en este caso ya como, Jefe de la Casa Real, desde septiembre de 2011 a la abdicación del monarca. Le tocó toda la marejada de la crisis de Bostwana, la operación del rey, el caso Urdangarin y la abdicación del Juan Carlos. Solo con que escriba un libro de Memorias tiene asegurada su jubilación.

La gente se olvida que presidió bajo Rodrigo Rato la Fundación Caja Madrid, con todo lo que esto supone .Y cuando fue Director de esta canonjía dimitió con cajas destempladas porque le habían quitado los bonus del que era beneficiario porque el muy caradura consideró injusto el tratamiento al que fue sometido. El caso de Spottorno fue uno de los más cuestionados porque protestó al considerar que un incentivo a largo plazo  debía ser concedido a una institución de gasto y no de ingreso como es la Fundación Caja Madrid. Del entorno del delincuente Miguel Blesa dijeron que harían todo lo posible para tratar de cobrar el bono. Es decir, tarjetas opacas y bonus. Saqueo a millón de Caja Madrid.

Spottorno ha sido el gran apoyo del Rey estos años. Un señor que gastó 223.900 euros gratis et amore de los depositantes de  Caja Madrid y que encima se quejaba por el asunto de los Bonus. Y luego va por la vida de probo funcionario. Y es que el saber estos datos nos van dibujando la calaña que ha habitado estos años en el Palacio de la Zarzuela empezando por el Gran Jefe.

El hombre, Don Rafael, con toda su cara ha dicho que no usó indebidamente nada sino que metió la mano en la caja siguiendo las instrucciones recibidas de que podía utilizar el dinero para y en los términos y con los límites que se le fijaron. Esos límites los fijó el gángster Blesa. Y a él, como le convenía, contestó: "Si Bwana".

Como se ve, "hombres de estado".

Lo extraño de todo esto es el silencio que hay sobre Spottorno en la prensa española y en los comentarios y en los comentaristas para salvaguardar el buen nombre de la Institución, cuando debía ser al revés. Que se sepa la catadura moral de esta gentuza al servicio de una Institución decimonónica y asentada en el privilegio y en meter la mano en la Caja.

¡Tarde piaste Pajarito!