Cada vez eran mayores los rumores de que
Gallardón pondría en un aprieto
a su jefe
Rajoy porque amenazaba con dimitir si no salía aprobada la
reforma del aborto tal y como la defendía. Pero no fue así: el
ministro de Justicia anunciaba ayer que el
proyecto. Eso sí, usó la excusa de que su departamento debe
"centrar todos los esfuerzos" en responder al "desafío soberanista"
catalán, que exigirá la presentación de uno o varios recursos ante el
Tribunal Constitucional.
Gallardón, como comentábamos hace unos días, también había logrado que la vicepresidenta del Gobierno,
Soraya Sáenz de Santamaría, y la secretaria general del PP,
Dolores de Cospedal, se pusieran de acuerdo en algo: criticar la propuesta lanzada por el ministro sobre una drástica reducción de aforados, que, según dijo en una entrevista periodística, pasarían de más de 17.000 a solamente 22. Pero no era la única medida discutida: su reforma del aborto es aún más polémica.
Se había dicho que el ministro no descartaba poner su cargo a disposición del presidente
Rajoy si éste decidiera paralizar la reforma. Lo
cierto es que, en su trayectoria al frente de Justicia, Gallardón ha
pisado ya demasiados callos, y no hay prácticamente togado que no critique sus
pretendidas reformas sobre el poder judicial o la elevación de tasas que
propuso. Igual ocurre con su reforma
del aborto, que probablemente tampoco entrará en vigor esta Legislatura, dado
que aún no ha llegado a oficializarse, mientras que ha suscitado una intensa
polémica justo cuando Rajoy quería 'vender' a la opinión pública sus logros
económicos.
Para
colmo, la 'propuesta Gallardón' en cuanto a la reducción de aforados ha
suscitado las iras de prácticamente todas las asociaciones judiciales, que
entienden que esta manera de acabar con un sistema vigente desde 1931 sería
altamente inconveniente, al posibilitar que un juez sea juzgado por sus
compañeros, y no por una instancia superior.
Pero no sólo se le critica por expertos y juristas. El Gobierno y su partido le dan la espalda mayoritariamente. Eldiario EL MUNDO apunta que Gallardón "afronta en solitario el acoso del PSOE por el aborto" y señala que "
ninguno de sus compañeros ha salido en su apoyo". "Pulso de Rajoy y Gallardón", titula EL PERIÓDICO. El diario señala que "ambos están protagonizando un pulso de consecuencias impredecibles con la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, en medio de la disputa": mientras Rajoy "evita aclarar qué hará con la ley", Gallardón "permite crecer los rumores sobre su dimisión si hay 'carpetazo' al proyecto".
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