JpD recuerda al ministro que él ya ha indultado a
políticos corruptos
Los jueces demócratas llaman 'mentiroso' a Gallardón por sus declaraciones sobre el indulto
jueves 13 de marzo de 2014, 12:23h
El ministro Ruiz-Gallardón ha declarado que su Gobierno
no ha concedido indultos en casos de corrupción y no lo va a hacer en el futuro,
pero "resulta evidente que el ministro no está diciendo la verdad". Así ha
respondido el portavoz de Jueces para la Democracia, Joaquím Bosch, a las
declaraciones de Gallardón para justificar su negativa a modificar su juguete
preferido: 'su' máquina de fabricar indultos de forma arbitraria a determinados
personajes.
Las declaraciones de Ruiz-Gallardón han caído como
gasolina al fuego en la judicatura, donde todos saben que la ley del indulto no
sólo es antediluviana -de finales del siglo XIX-, sino que se usa de forma
arbitraria por el poder para beneficiar a algunos personajes muy determinados.
Y eso es lo que el portavoz de Jueces para la
Democracia, Joaquím Bosch, le ha respondido al aún ministro de Justicia,
llamándole embustero: "Este gobierno ha indultado a miembros de su propio
partido en casos de prevaricación urbanística y a otros cargos condenados por
delitos contra la administración pública", ha dicho Bosch, quien ha añadido que
"estos indultos se han acordado sin ninguna explicación de las causas que los
motivaban".
Bosch le ha recordado igualmente a Gallardón que "también
ha existido absoluta opacidad en los indultos a agentes que han torturado o a
conductores kamikazes. Con estas medidas de gracia se realiza un uso abusivo de
la figura del indulto, se vulnera la división de poderes propia de un Estado de
Derecho y se provoca el descrédito de las instituciones, pues se traslada a la
ciudadanía la imagen de que la justicia no es igual para todos".
Un buen número de jueces y magistrados opinan que los
datos objetivos sobre concesión de indultos "indican con claridad que el mayor
porcentaje se produce en los delitos vinculados a la corrupción o en supuestos
de personas que tienen conexión con el poder político". Y dicen que esto provoca
la sensación de que "el poder se perdona a sí mismo, a pesar de contar con el
criterio desfavorable a estas medidas de gracia de los tribunales
sentenciadores".
En definitiva, que "el indulto se está configurando
como una cuarta instancia en la que, sin ninguna justificación, el Gobierno
puede dejar sin efecto lo acordado en los juzgados".
Uso y abuso de la 'máquina de hacer indultos'
Para JpD está claro que este "uso inadecuado" de los
indultos está provocando "un considerable malestar en todos los sectores de la
judicatura, que observa con perplejidad cómo quedan en papel mojado las
sentencias, en ocasiones tras un importante esfuerzo de investigación judicial.
Este descontento ha llegado hasta el propio Tribunal Supremo, que en sus
últimas resoluciones sobre la materia ha puesto de manifiesto la arbitrariedad
en la concesión de los indultos".
Así las cosas, la asociación de jueces concluye que
resulta necesaria una reforma de la Ley de Indulto, a pesar de la oposición del
Gobierno, que parece querer reservarse la facultad de perdonar las penas
injustificadamente a quien desee: "En un Estado de Derecho no es admisible la
existencia de espacios de impunidad arbitraria. Hace falta una nueva
legislación, que regule la motivación obligatoria de cada indulto y que
establezca un control judicial sobre las medidas de gracia, lo cual permitiría acabar
con la sensación de amiguismo que actualmente se percibe desde la ciudadanía",
dicen.