Interior podría tener ya en su poder la documentación para instar la ilegalización de Sortu y Bildu
Problema en las cárceles: una cincuentena de presos quiere la vuelta a la lucha
armada
jueves 09 de enero de 2014, 12:09h
El
tiro puede haberle salido por la culata por partida doble al Gobierno de Rajoy:
no sólo el
anticipo en anunciar la operación policial del miércoles propició la
destrucción de documentación por el supuesto comité de presos de ETA, sino que,
los documentos contenidos en las 20 cajas que finalmente pudieron ser
requisadas podrían contener los argumentos necesarios para instar la
ilegalización de Sortu y Bildu. Pero si ilegalizan a los abertzales de
izquierda no queda salida política para los proetarras y podría hacer
reversible lo que hoy parece acabado. De una o de otra manera, Interior la ha
liado buena.
Según
fuentes conectadas con la lucha antiterrorista, el objetivo inicial de la operación
contra ETA de este miércoles pasado en Navarra y el País Vasco era el de
liquidar el 'comité de cárceles' de ETA; es decir, descabezar la única
estructura activa que ETA tiene en España y que controla a los presos: la "Koordinazioa
Taldea" -KT- (Grupo Coordinador), encargada de diseñar la estrategia de los
presos y de imponerles la disciplina para evitar deserciones.
Según
han dicho a Diariocrítico esas fuentes conectadas con la lucha antiterrorista,
la idea de Interior es ir rompiendo la estructura de los 'numantinos'; es
decir, de una cincuentena de presos que, según esas fuentes, permanecen en las
cárceles españolas con una enorme condena de años a sus espaldas y que no confían
ni en procesos de paz ni mucho menos quieren la disolución de ETA.
Esos
'numantinos' querrían resistir hasta el final, e incluso abogarían por la
vuelta a las armas. A esos etarras actualmente en prisión se sumarían algunos
otros que fueron detenidos en la época del gobierno de Felipe González, pero
que les han tenido que excarcelar en función de la sentencia de Estrasburgo que
puso fin a la 'doctrina Parot'.
El
riesgo de la vuelta atrás, por tanto, es evidente, y es algo que preocupa no
solamente al nacionalismo vasco democrático y a los socialistas de Euskadi,
sino también al PP vasco, al Gobierno de Rajoy e, incluso, a quienes dentro del
movimiento abertzale de izquierdas propugnan una salida política para lo que
ellos llaman 'el conflicto'.
Así
las cosas, según esas fuentes consultadas por Diariocrítico, se trataba de
desarticular lo último que le quedaba a ETA en marcha, su 'frente de makos', de
tal manera que se impida, o al menos se dificulte, que los 'irreductibles' o 'numantinos'
puedan adoptar con relativa facilidad medidas comunes y extremas.
La
documentación para ilegalizar Sortu y Bildu
Ahora
bien, para otras fuentes de Interior, la operación de este miércoles liderada por
el juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco parece que puede tener un efecto
no deseado: las 20 cajas de documentación incautadas por la Guardia Civil en
Navarra y en Bilbao pueden contener pruebas que permitan al Gobierno del PP ordenar
que se inicie el procedimiento de ilegalización de Sortu y Bildu.
Lo
anterior significaría un objetivo en principio no deseado, porque si a los
etarras dispuestos a disolver la banda e ir a la vía política, o a la propia
izquierda abertzale, se le impide la posibilidad de esa misma vía política, la
idea de los 'irreductibles' en prisiones españolas y francesas podría tomar
cuerpo y revertir en una especie de 'ETA auténtica', es decir, una escisión que
no conviene a nadie, ni siquiera a los restos de ETA que aún controla el equipo
de Josu Ternera.