Según recoge el escrito de acusaciones, el fiscal pide para el acusado 3 años y 3 meses de cárcel por el primero de los delitos y 6 meses por el segundo de ellos, además de solicitar 6.000 euros en concepto de responsabilidad civil.
El fiscal asegura que el acusado llegó a un acuerdo con F.L.C. en julio de 2009 para arrendarle varias fincas propiedad de la empresa, contrato que se firmó con el representante legal de la compañía, para que éste las cultivara por un período de un año por un precio de 12.000 euros, cantidad que sería abonada a final de este período, período que podría ser renovado.
Entre mayo y junio de 2010, según recoge el escrito, el gerente se reunió con el arrendatario y le dijo que iban a cambiar las condiciones del acuerdo y que el alquiler de la tierra iba a bajar a 6.000 euros al año, pero que tenía que abonárselos en efectivo, cosa que hizo sin que, a cambio, se le diera ningún documento o recibí de que había hecho el pago, pese a solicitarlo.
El exgerente ocultó esta actuación al nuevo Consejo de Administración de EMUMASA y cuando llegó la finalización del contrato legal, julio de 2010, procedió a la renovación del contrato de arrendamiento, sin que al arrendatario se le exigiera el pago de los 12.000 euros del contrato legal.