Los trabajos para este documento de 64 páginas,
bajo el título "Recuperar la confianza en la política y en los partidos:
mejorar la calidad de la Democracia en Europa", han sido coordinados por
Ramón
Jáuregui, uno de las figuras con mejor cabeza política del Partido Socialista.
El documento, que se trata, en realidad, de un 'viaje obligado' para el propio
PSOE, se inicia con el reconocimiento de una realidad trágica, la mala salud
del sistema democrático en nuestro país bajo el Gobierno de derechas de
Mariano
Rajoy:
"En unos pocos meses, la crisis política e
institucional en España ha alcanzado unos niveles desconocidos. Se trata de un
proceso serio y profundo, que afecta a lo más importante del sistema
democrático: la legitimación de sus instituciones y de sus representantes, la
confianza de los ciudadanos en su sistema político. Para más del 25% de los
españoles, los políticos y los partidos somos el tercer problema del país y un
70% declara que la política les genera desconfianza...".
Así comienza el documento de Oviedo, en el que se
reconoce que la profundidad y la gravedad de la crisis han suscitado una
censura y descrédito que se han visto agravados por la aparición de sucesivos y
escandalosos casos de corrupción. Pero ¿cómo poner remedio a este problema? Los
socialistas proponer tales cambios en nuestro sistema democrático para evitar
la evidente "desafección ciudadana e insatisfacción con la política
democrática", que suponen un vuelco extremo respecto a lo hasta ahora conocido.
He aquí sintetizadas las principales propuestas socialistas para regenerar un
sistema que muchos ciudadanos califican de 'caducado'.
Cambios en los partidos: poner fin al 'latrocinio'La sociedad española no confía ni en sus políticos
ni en sus partidos. Lo dice el CIS. Ante esa realidad, el PSOE propone una
auténtica catarsis generalizada y de obligado cumplimiento. Las medidas pasan
por tres ejes críticos: reforma de la Ley de financiación de los partidos
políticos, modificar la Ley de partidos y establecer por ley ineludible la
democracia paritaria, tanto en sus órganos directivos como en sus candidaturas.
Para garantizar la transparencia de las cuentas de
los partidos políticos, el documento propone medidas concretas, como delimitar las
posibles fuentes de financiación; prohibir las donaciones de empresas y de
particulares vinculados a empresas que mantengan contratos con las
administraciones públicas; limitar la cuantía de las donaciones particulares e
impedir el anonimato; determinar la financiación y el uso de los recursos de
las Fundaciones de los partidos y los grupos parlamentarios y municipales;
revisar el marco financiero de las campañas; reforzar el papel de control y
fiscalización del Tribunal de Cuentas para auditar en tiempo real, y obligar a
publicar en las webs de los partidos sus presupuestos anuales y el resultado de
su ejecución. Además, claro está, de que se aplique a los partidos la Ley de
Transparencia.
Un Senado reducido y territorial, y un Congreso
con el 'diputado 351'Fundamental le parece al PSOE la reforma del
sistema parlamentario español. Para el Senado actual, que la sociedad percibe
como 'poco útil', los socialistas proponen una reforma de la Constitución que
modifique su composición para convertirlo en una verdadera Cámara Territorial,
asegurando la presencia de las Comunidades Autónomas.
Lo anterior se lograría mediante la
presencia de representantes de los gobiernos autonómicos o la elección de los
senadores en las asambleas parlamentarias autonómicas, o bien, mediante un
sistema mixto de ambos. Además, se integrarían las instituciones del Gobierno
de España y de las Comunidades, encargadas de la gobernación conjunta del país
como el Consejo de Política Fiscal y Financiera, la Conferencia de Presidentes
y las Conferencias Sectoriales.
Respecto al Congreso, el PSOE propone estas
medidas radicales, que hasta ahora ni socialistas en gobiernos anteriores, ni
mucho menos populares, han aceptado aprobar:
- Que ya no baste con tener mayoría absoluta en la
Mesa de la Cámara para obstaculizar y rechazar las iniciativas de la oposición:
todas las iniciativas serán admitidas a trámite, salvo que voten en contra al
menos dos tercios de los miembros de la Mesa.
- La creación de Comisiones de Investigación
requerirá, únicamente, haber sido solicitada por una tercera parte de los
miembros de la Cámara.
- Modificar el sistema de las sesiones de Control
al Gobierno para que un determinado número de diputados puedan levantarse y
preguntar directamente, sin que el Ejecutivo sepa con antelación ni el diputado
ni la pregunta que le van a formular.
- Todos los Decretos-Leyes tendrán que ser
tramitados como proyecto de ley, cuando así lo pidan dos grupos parlamentarios
o una tercera parte de los diputados (116 diputados). El Tribunal
Constitucional tendrá que resolver en menos de un mes los recursos que se le
presenten a un Decreto-Ley.
- En todos los Plenos del Congreso deberá
incluirse -si existiera- una iniciativa legislativa popular.
- En los meses de enero y julio, que el Pleno se
reúna una vez cada dos semanas y que en agosto se pueda celebrar un pleno con
acuerdo de la Diputación Permanente, así como permitir el trabajo de las
comisiones para no paralizar sus funciones.
Ley electoral: por fin, un sistema semi-abiertoUn cambio realmente importante es el que se
refiere a la modificación de la Ley Electoral, que busca acercar las
candidaturas a los ciudadanos y aumentarla capacidad de participación y
decisión de los electores en las mismas. Para el PSOE, estos problemas se
resuelven con unas medidas realmente nuevas en España:
- Que todos los partidos elijan a sus candidatos a
la Presidencia del Gobierno en elecciones primarias debidamente ordenadas y
reguladas por la Ley Electoral.
- Abrir las listas electorales a que los
ciudadanos señalen preferencias personales respecto a los candidatos. No son
listas abiertas como tal, pero es un primer paso, sin duda.
Transparencia para evitar el abuso y la corrupción:
del Rey para abajo, ley para todosA estas alturas parece evidente que se ha
producido un serio proceso de anomia entre la clase política y la ciudadanía.
Para hacer frente a este problema, regenerar la 'rex publica' y aumentar el
nivel de confianza, el PSOE propone algunas medidas radicales...
- Que la Ley de Transparencia obligue a las
Administraciones Públicas a poner a disposición de la ciudadanía toda la
información posible (en qué y cómo se gasta el dinero) de manera ordenada y
fácil de consultar.
- Que obligue a hacer públicos sus presupuestos,
cuentas y movimientos económicos, a la Casa del Rey, los partidos políticos,
las organizaciones empresariales, sindicales y cuantas organizaciones,
entidades y empresas dispongan de financiación pública equivalente al 40% al
menos de sus ingresos.
- Los miembros de los Gobiernos estarán obligados
a presentar su Declaración de bienes y patrimonio al inicio y al final de la
legislatura.
- Se publicarán las retribuciones íntegras de
todos los Altos Cargos de la Administración, en sus respectivas páginas web.
- Serán igualmente públicas tanto la Declaración
de bienes y patrimonio como las retribuciones íntegras de los parlamentarios.
Más ciudadanía en los asuntos de la gobernaciónHasta ahora, al ciudadano sólo se le permite
participar cada cuatro años en política; a partir de ahora, el PSOE propone
abrir canales a la participación ciudadana, que todos puedan participar en la
toma de decisiones políticas que les afectan, a través de las siguientes medidas:
- Creación del 'Diputado 351': es decir, que el
Parlamento pueda -y deba- debatir propuestas de la ciudadanía. Para ellos, se
propone la creación de la Oficina del Ciudadano en las Cortes Generales que se
encargaría de gestionar: solicitud de información y entrevista con
representantes políticos, y registrar preguntas parlamentarias y presentar
proposiciones no de ley e iniciativas legislativas populares, siempre que
cuenten con un determinado número de firmas y apoyo ciudadano. Esta Oficina se
convertiría así en el 'diputado 351'.
Paralelamente, una Comisión Permanente de
Peticiones y Participación Ciudadana entenderá de los asuntos que proponga la
ciudadanía.
Para la vertiente municipal, el PSOE intenta
ahondar en la democracia local proponiendo establecer por ley que una parte de
los presupuestos municipales estén sujetos a la voluntad ciudadana, dando a los
habitantes de un municipio la posibilidad de decidir sobre cómo se utiliza el
dinero público.
Si no acabar, por lo menos luchar contra los 'chorizos'El PSOE sostiene que la corrupción política es,
junto a la crisis económica, la mayor amenaza para la democracia y que, por
tanto, hay que erradicarla. Entre otras cosas, para ese fin propone medidas concretas
como las siguientes:
- Reforma de la Ley de Financiación de Partidos,
en la línea ya apuntada anteriormente.
- Código de conducta asumido por todos que pueda
aplicarse en los casos de sospechas fundadas de comisión de delitos por
personas que aspiran a ir en las listas electorales o que están ejerciendo
cargos públicos.
- Creación de una Agencia estatal anticorrupción
con capacidad para actuar en todas las Administraciones Públicas.
- Creación de una Agencia de evaluación
urbanística y de suelo, conjunta del Estado y la Comunidades Autónomas, con
capacidad para suspender el desarrollo de las actuaciones urbanísticas
controvertidas hasta que los tribunales decidan.
- Establecimiento de un tipo penal específico
aplicable a la financiación ilegal de partidos políticos y endurecer las penas
por este tipo de delitos.
- Modificar la normativa sobre el indulto para
excluir de su aplicación los delitos cometidos por funcionarios y autoridades
en el ejercicio de sus funciones y los delitos relacionados con la violencia de
género y la seguridad vial con resultado de muerte de la víctima.
'Socialismo útil': afiliados, militantes y
simpatizantesDe cara a la reordenación interna del propio Partido
Socialista, el documento 'más democracia' establece una serie de normas para
ser aplicadas internamente; normas que recogen incluso la elección de los
dirigentes máximos del partido por primarias, así como el candidato electoral,
y en un proceso abierto a toda la ciudadanía y no sólo reservado a los
militantes, como hasta ahora. Se trata de hacer "un PSOE más útil para aportar
soluciones y más abierto para aplicarlas con la participación de la ciudadanía
activa".
Tal como acordó el 38 Congreso Federal del PSOE
(2012), el documento abunda en la tesis de que todos los ciudadanos que lo
deseen puedan participar en los procesos de elecciones primarias abiertas para
elegir al candidato a la Presidencia del Gobierno. Para ello se contemplan
diversas figuras: 'militante', con plenos derechos políticos y orgánicos; 'afiliado
directo': participa, a través de Internet, en debates y espacios de diálogo,
aportando sus ideas y sugerencias, pero puede inscribirse en una Organización
Sectorial del PSOE y participar en los procesos de elecciones primarias, y 'simpatizante':
se implica en el debate de ideas, propuestas y programas del Partido y
participa como voluntario en actividades o en campañas electorales y en los
procesos de primarias.
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LEA ÍNTEGRO EL DOCUMENTO SOBRE 'MÁS DEMOCRACIA' APROBADO POR EL PSOE EN OVIEDO