El portavoz del cuerpo de policía,
Lars Bystrom, dice que sus compañeros encontraron una pequeña cantidad de drogas y un táser, un arma paralizante, cuando los agentes irrumpieron en el autobús vacío estacionado debajo de la sala de conciertos Globen, en Estocolmo.
Bystrom añadió que no tienen ningún sospechoso y que de momento nadie ha sido arrestado. El portavoz no quiso desvelar de que droga se trataba, después de que esta fuera enviada a un laboratorio para hacerla un análisis.
La policía actuó después de percibir un olor similar al de la marihuana que provenía del autobús, mientras este estaba aparcado en el hotel en el que se hospedaba
Bieber. La brigada anti-droga fue alertada y fueron al autobús durante el concierto.
Sin embargo, una fuente cercana a Bieber negó las afirmaciones hechas por la policía. "Los policías no encontraron nada y se fueron. No hay nada. Nada.", dijo la fuente a FOX.
El jueves por la mañana, el joven cantante tuitteó: "Estos rumores acerca de mí...¿De dónde han salido?... de vuelta a la música".
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