El próximo día 23
CiU se adelanta al Gobierno: llevará al Congreso su propia Ley de Emprendedores
martes 16 de abril de 2013, 19:25h
El Pleno del Congreso debatirá el próximo martes si admite a trámite la
proposición de ley de Medidas de apoyo a la creación de empresas por
parte de emprendedores y su financiación, presentada por CiU, que de
esta manera se adelanta al Gobierno, que prometió una ley de ese tenor
en su programa electoral y que prevé aprobarla en Consejo de Ministros a
finales de abril o principios de mayo.
En esta propuesta, CiU define como emprendedor a toda persona física
que lance o haya lanzado en los últimos 24 meses un proyecto empresarial
a través de una empresa individual o de una entidad jurídica, con
actividad económica pero "en ningún caso" dedicada a la gestión de un
patrimonio mobiliario o inmobiliario -que tengan más de la mitad de su
activo en valores o no afecto a actividades económicas, según lo
declarado en el IRPF-.
También se considera emprendedor al titular de empresas de
Economía Social domiciliadas en España y, a los efectos de poder
beneficiarse de apoyo de inversores de proximidad, a las compañías con
menos de cinco años de antigüedad.
Beneficios sociales
Todos ellos podrían así beneficiarse de una exención del 75% en el
IRPF o en el Impuesto de Sociedades por las rentas de los primeros
cuatro años de actividad, siempre que no se superen los 200.000 euros,
en cuyo caso "la exención se aplicará proporcionalmente al peso de las
citadas cuantías respecto la facturación total de la empresa".
Por otra parte, los emprendedores también podrán capitalizar la
totalidad del paro para iniciar una actividad o constituirse como
autónomos, recibiendo el abono de una sola vez por el importe que
corresponde a la inversión necesaria o para cubrir la parte del capital
social inicial que corresponda, incluidas las cargas tributarias.
Inversores de proximidad
Con respecto a los inversores de proximidad -también llamados
'business angels' o 'Family, Friends and Fools'-, se definen como los
inversores individuales que aportan, a título personal o a través de una
sociedad unipersonal, capital hasta 200.000 euros, conocimientos
técnicos y asesoramiento a una nueva iniciativa emprendedora durante su
etapa inicial o a la expansión y desarrollo de una pyme con potencial de
crecimiento con el objetivo de obtener una rentabilidad a medio plazo.
Estos inversores deberán estar adscritos a una red, cuya
reglamentación deberá determinar los requisitos que se deben cumplir
para ser reconocidos oficialmente 'red de inversores de proximidad'.
Para ello será necesario crear un registro oficial y que los órganos de
supervisión financiera de cada comunidad o la Comisión Nacional del
Mercado de Valores (CNMV) supervisen su funcionamiento.
Podrán deducirse del IRPF o Sociedades el 25% del capital aportado
hasta un máximo de 200.000 euros anuales y de 200.000 euros de
inversión en una misma empresa, "siempre que dicho capital se mantenga
un mínimo de cuatro años" en la misma compañía. En caso de incumplir ese
plazo, deberá devolver las deducciones con sus correspondientes
intereses de demora, excepto si la desinversión es por liquidación.
Además, entre el cuarto y el octavo año tendrán derecho a una
reducción del 50% por los dividendos e intereses, que tributarán como
renta del ahorro al tipo de gravamen general. En caso de transmisión de
las participaciones, las ganancias gozarán de una exención del 50%
mientras que si son pérdidas, se podrán compensar en su totalidad,
excluyendo las deducciones ya aplicadas, mediante una reducción de la
base imponible del ahorro.
Si se financia un proyecto de un emprendedor social, la deducción
aumentará en cinco puntos porcentuales en todos los supuestos. Eso sí,
la base de las deducciones no podrá exceder del 25% de la base
liquidable en ningún caso.
Para fomentar la contratación en estos nuevos proyectos, CiU
propone que los beneficiarios de la prestación por desempleo
contributiva puedan constituirse como trabajadores autónomos o socios de
empresas de nueva creación capitalizando todo el paro.
Otras bonificaciones
En la proposición se incluyen otras bonificaciones como las de
cotizaciones a la Seguridad Social para los autónomos emprendedores o
por la contratación de trabajadores desempleados del 90% el primer año,
75% el segundo y 50% el tercero.
Asimismo, se reclama una simplificación administrativa para este
colectivo, proponiendo que los emprendedores deban llevar únicamente de
forma obligatoria el libro de registro de ventas e ingresos, el de
compras y gastos, y el de bienes de inversión; aunque también deberán
conservar justificantes y documentos acreditativos de todas estas
operaciones durante el plazo de prescripción.
En la proposición de ley, CiU recoge asimismo la petición de que
el Gobierno tenga que presentar anualmente en el Congreso un
informe-evaluación sobre los resultados de la actividad de creación de
empresas y financiación de inversores de proximidad y regular, en el
plazo de un año, la figura del Emprendedor Social. Asimismo, en tres
meses el Ejecutivo debería aprobar el 'visado emprendedor', destinado a
"atraer talento empresarial e innovador del resto del mundo".
Apoyo a la financiación
Por último, los nacionalistas catalanes incluyen en su proposición
de ley una serie de medidas para mejorar el acceso a la financiación a
través de varios instrumentos con los que cuenta la Administración
General del Estado.
Así, proponen elevar los préstamos participativos de la Empresa
Nacional de Innovación (ENISA) hasta el 25% de su actividad, así como
fijar una cantidad anual de dicha entidad y del Instituto de Crédito
Oficial (ICO) para conceder microcréditos a mujeres, jóvenes y
discapacitados, con un tipo de interés subvencionado y una duración en
ningún caso superior a los cinco años. Con respecto a la Empresa de
Innovación se pide además que en el plazo de tres años se apruebe un
plan para doblar su presupuesto y destinar anualmente "no menos de un
25% de su actividad" a financiar el emprendimiento.
También sugieren fomentar los programas de avales de la Compañía
Española de Reafianzamiento (CERSA) y las Sociedades de Garantía
Recíproca, con el objetivo de otorgar una cobertura parcial de las
previsiones y las que se deriven de los riesgos. Asimismo, se ampliará
el capital de CERSA para permitir que las sociedades de garantía que
cuenten con un sistema de refinanciamiento al 90% de los avales
concedidos a emprendedores.
En cuanto a los Fondos de Titulación para pymes a emprendedores,
CiU propone estimular su uso para lograr mayores facilidades en los
préstamos y créditos de entidades financieras, con un plazo de
amortización inicial no inferior a un año, concedidos a empresas no
financieras domiciliadas en España y de los que, al menos el 60% sean
concedidos a empresas de nueva creación y pymes con aval del Estado.
Asimismo, se prevé que las entidades que den estos créditos deban
reinvertir al menos el 80% de la liquidez obtenida a nuevos préstamos en
un plazo de, como máximo, dos años. "Al menos el 60% de la reinversión
deberá realizarse en el primer año", apostillan los nacionalistas
catalanes, que proponen al Gobierno fijar por ley que el 0,5% de los
activos de las entidades de crédito se deban destinar obligatoriamente a
financiar proyectos de emprendimiento.
El portavoz parlamentario de CiU, Josep Antoni Duran i Lleida, ha
reconocido que espera que el PP admita a trámite esta iniciativa, dado
que el propio presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha anunciado en
diversas ocasiones que presentará a finales de abril o principios de
mayo una regulación para esta figura. "No tendría sentido que, una vez
reconocida la necesidad de legislar sobre esta figura, el PP no apoyara
esta propuesta, por lo que emplazo al partido de Gobierno a que sea
coherente", añade el democristiano.
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