Único e irrepetible. Y, como los quería (a los genios y/o intelectuales) Baudelaire: sublime sin interrupción. Pongamos que se habla/escribe de José Luis Cuerda. El director de cine, con varias películas de auténtico culto como la surrealista e inclasificable 'Amanece, que no es poco' y/o 'La marrana', que es la historia del descubrimiento de América desde la óptica de los desfavorecidos, y/o la lírica y crítica 'La lengua de las mariposas', salta del cine a la literatura o lo que sea su reciente y también inclasificable libro de título imposible: 'Si amaestras una cabra, llevas mucho adelantado'.
Un libro pleno de 'inteletos', -'un 'palabro' muy de Albacete, como el propio José Luis Cuerda- y que pese a que acaba de salir, está teniendo mucha aceptación cual comprueba su autor en la ristra de presentaciones pasadas -en Madrid lo hizo con Jordi Évole-, presentes y futuras del mismo. Y es que sólo a él, a este pensador, a este rey del humor crítico,
críptico, surrealista, reflexivo, inteligente y... manchego, ¡claro!, se
le podía ocurrir algo así:
'Si amaestras a una cabra, llevas mucho adelantado', publicado por Ediciones Martínez Roca.
Se refiere, según explica, "a la cabra que todos llevamos dentro y que debemos ir metiéndola en vereda, dialogando con ella, amaestrándola para que se adapte a las convenciones sociales". El caso es que este premiadísimo cineasta albaceteño, que dice estar en paro ahora, que utiliza a tope las redes sociales, saca continuos y descacharrantes mensajes de menos de 140 caracteres -algunos de los cuales forman parte del libro-, nos llena de su humor, no exento de profundas reflexiones muchas veces, con estas ocurrencias.
Suma de muchos 'inteletos'
Ocurrencias -"o sea, 'inteletos', explica Cuerda- en forma de frases que constituyen el texto de esta única e irrepetible obra en la que los dibujos, incluido el de la original portada, son del mismísimo director de cine y escritor, faceta que no es nueva. "Yo siempre he escrito, lo que pasa es que no publicaba", se defiende el dios laico del tan de moda del humor manchego, sección albaceteña- cuyos monaguillos y seguidores son sus paisanos Joaquín Reyes y su 'Muchachada'- el autor del genial y surrealista guión de 'Amanece, que no es poco'
De este intelectual tan 'sui géneris' que añade, respecto a la cabra que tras el intento de amaestrarla "el animalico lo hace, se aviene". Porque, según él, se producen entonces en nuestras vidas momentos radiantes, de conformidad luminosa: "Así, empecé yo hace unos meses, a escribir los textos que
dan cuerpo a este libro. El milagro de convertir en
letras, palabras o frases lo que
fragua el pensamiento-cabra se produce con la doma de las ideas-cabras. Amaestrada
la
cabra, sujeta a norma escrita y dibujada, uno,
en
esta
feria
del mundo, la
exhibe sin escalera y sin látigo. Y por si caen unas perras en la boina".
Como es lógico y hasta justo y necesario, un genio así no podía tener una biografía normal y corriente, quia. También es surrealista. Mayormente en sus inicios. Porque tras nacer en Albacete, lo que ya marca, y pasar tres años "lujuriosos" en los seminarios de Hellín y de la capital, inició el bachillerato en los Escolapios "penal de la orden de la región valenciana, lleno de curas malos -y más vale que no me
tiren de la lengua- y en el Instituto de Enseñanza Media", cual relata. Después se trasladó a Madrid, porque su padre
ganó al póker
un piso
a estrenar en el paseo de
la Habana
a uno
de los más conocidos constructores de este país.
Trabajo en TVE
Y bueno, ¿para qué entrecomillar más", dejemos que sea el mismo Cuerda, el que acabe su biografía: "Terminé mis estudios primero, en un colegio donde el matrimonio Rubert-Ontañón hacía lo que
podía -ponernos de rodillas, dar algún pescozón...- y mimaban como se merecía al compañero y luego científico Barbacid. Rematé preu de letras en el Liceo Anglo Español del señor Verdú - abuelo según supe años después de Maribel- e iniciador nuestro en goces como el de beber Vega Sicilia, invitados por él. Tres años -cursos incompletos- de Derecho en la Complutense me animaron a militar durante una temporada en el PCE y a abandonar la carrera".
"Durante los
que estuve en TVE, muchos, aprendí la práctica de rodar y,
paseando con los amigos por Argüelles, la teoría e historia del cine por lo menudo.
Luego, he rodado una
docena de largometrajes 'El bosque animado', 'Amanece,
que no
es poco' y 'La lengua de las mariposas', entre otros, y he pasado -han pasado sobre mí- dos o tres enfermedades muy puñeteras que me han facilitado la vuelta a mi primera inclinación artística: escribir. Y eso es lo que nos trae aquí". Único, irrepetible y, como los quería Baudelaire, a los genios: sublime sin interrupción.