La columna de Gema Lendoiro: 'Corinna, rubia y, sin embargo, lista'

Hay que reconocer que el Mundo se ha llevado un gran tanto entrevistando a Corinna. Me permito llamarla sólo por su nombre de pila porque es ya tan importante que no hace falta pronunciar sus (difíciles) apellidos para referirse a ella. Ni siquiera don Felipe de Borbón tiene ese privilegio. Para referirse a él hay que añadir de Borbón. Sin embargo a esta estupendda rubia le sucede como a Letizia. Basta con decir su nombre y todos sabemos quién es. Reitero mi felicitación al diario de Pedrojota pero añado que tanto las fotos como las declaraciones son más propias de la revista más famosa del corazón de España que de un periódico serio. Muchas veces la labor de un periodista consiste en hacer que un ser humano listo parezca idiota porque pone en su boca declaraciones que, sacadas de contexto, hacen que realmente la gente se lleve esa imagen. Esto la decana de las revistas del corazón lo borda. Un mismo personaje entrevistado ahí o en, por ejemplo, Vanity Fair, varía sustancialmente.Solo hay que echar un vistazo a esas entrevistas hechas a gente forrada que nadie conoce pero que nos enseñan sus mansiones, mayormente para ponernos los dientes largos y no por el buen gusto siempre, sino por el dineral invertido en ellas. Las declaraciones que las acompañan suelen versar en torno a temas tan importantes como lo sensibles que se muestran ante la pobreza del mundo. Y siempre te lo cuentan subidas a ferraris o bañándose con champán y fresas en una piscina de las dimensiones del Beranbéu y que, si te descuidas, la han llenado con Evian. Ellos, que pueden.

Pero hay veces que con el personaje, por mucho que se haga, por mucho que el periodista se esfuerce, queda como una Barbie. Y así ha quedado Corinna. En primer lugar las fotos, tan cuidadas, tan retocadas, más parece una modelo anunciando una carísima crema francesa para mujeres maduras que la mujer de prestigio y profesional que quiere vendernos. Lo de "es difícil llegar tan alto en este mundo siendo mujer" es un magnífico guiño a alguna feminista cursi y trasnochada que igual cuela. Ahora bien, añadir a esta elocuente frase, "sobre todo si eres rubia" revela que haría las delicias de alguna que otra revista de moda si la princesa serenísima se dedicase a escribir un blog de moda y a sentarse en cualquier front row que se precie. Como si la estuviera viendo. Cuidado Adriana Abascal, veo peligrar tu imprescindible blog.

Lo de la "entrañable amistad" con el Rey de España es también muy propio de las revistas del cuore. Es un lacónico eufemismo como murió después de padecer una larga enfermedad, o como aquel  que uso la casa Real para decir que los duques de Lugo ya no se querían ver ni en pintura. ¿Cómo era? Ah sí, el cese temporal de la convivencia.Lo que importa es siempre guardar las formas. En vivo y en directo estos personajes jamás alzan la voz. Si se transcriben sus palabras, suenan así, como las leen, llenas de eufemismos. En realidad comparten una gran virtud con los políticos, la de hablar mucho y no decir nada. O nada que sea relevante, quiero decir.

Cursiladas aparte me sorprende la generosidad de esta mujer. Dice que no cobraba por hacer estos trabajillos al gobierno español. ¿Cómo es posible dicho altruismo? ¿Por su entrañable amistad con el Rey, quizás? Bueno, si es así, los maltrechos bolsillos de los españoles se lo agradecemos porque bastante nos ha saqueado, presuntamente, el yerno de su "entrañable amigo" con informes varios de copia y pega. Lo que pasa es que servidora, porque es muy malpensada, no se lo cree. Seguramente Diego Torres en algún malévolo mail más adelante pueda darnos luz a este oscuro asunto. O quizás debamos preguntar a los responsables del gobierno de entonces, el PSOE, cuáles an sido esas acciones de alto secreto. A ver si tenemos una spanish 007 y nosotros pensando que el CNI es algo así como la agencia de Mortadelo y Filemón.

Dice también su Alteza Serenísima (mientras su ex marido no contraiga de nuevo matrimonio ella podrá seguir usando el título de princesa) que sólo quería encontrarle un trabajo digno a Iñaki. Hombre, ¡y tan digno! Tenía yo entendido que un trabajo digno era otra cosa, no sé, algo por lo que te pagan unos mil euros al mes y no te explotan demasiado.

Pero lo más curioso de todo esto es que cuando uno lee a una mujer rica hablar así se da cuenta cuán lejos están las posibilidades del común de los mortales de acceder a ese tipo de vida, ¿verdad? No teniendo un cv envidiable ni un pasado profesional digno de mención, salvo meter goles en portería contraria y de un deporte minoritario como es el balonmano, que te ofrezcan una presidencia por 200 mil al año más 50 mil por otras cosas. ¿Quién está al alcance de todas esas cosas, verdad? Quizás sea por esto, porque ellos llegan donde el resto no llegamos por mucho que nos esforcemos, por lo que siempre se están descojonando. Y es que me van ustedes a perdonar pero el refrán no puede ser más revelador: Con buena picha...bien se folla. Aunque seas rubia y, sin embargo, lista. ¿Verdad, Corinna?