lunes 26 de noviembre de 2012, 21:29h
Que conste que no voy a escribir del circo que se ha montado en Cataluña después del fracaso electoral de don Arturo Mas el
25-N. Entre otras cosas porque ya se ha dicho todo y porque estoy hasta
la mismísima coronilla de las pamplinas de los soberanistas y sus
aspiraciones separatistas. ¡Qué se vayan de una puñetera vez y nos dejen
tranquilos! Así que me voy a olvidar de lo que le ocurrió el domingo a
ese líder de pacotilla y me centraré en lo que es mi obligación:
analizar lo que está ocurriendo en este tierra al sur de Despeñaperros
que cada día se parece más al famoso circo de la tele por culpa de unos
políticos que se empeñan en hacer el payaso a costa del bolsillo de los
contribuyentes (y contribuyentas). Me refiero, claro está, al dictámen
de la Comisión Parlamentaria de Investigación de los EREs fraudulentos
que ha rizado el rizo de lo absurdo por obra y gracia de una coalición,
IULV-CA, que se decía de izquierdas y que ahora ha cambiado su
independencia y su integridad por unos cuantos sillones en el Palacio de
San Telmo. ¿Por qué será que Diego Valderas me recuerda al lider del ERC, Oriol Junqueras? Alguien, creo que el lider del PP-A, Juan Ignacio Zoido, ha tildado el dictámen de la Comisión de Investigación de los EREs como "un homenaje póstumo a Miliki".
Y no le falta razón. Que después de casi un centenar de comparecencias y
casi seis meses de debates y análisis se concluya con que el único
responsable del desaguisado y de la estafa de miles de millones de euros
ha sido exclusivamente el ex director general de Empleo, Francisco Javier Guerrero, suena a puro cachondeo, a una irrisoria actuación de los famosos payasos de la tele con el presidente ela Comisión, Ignacio García, de IULLV-CA, en el papel de Fofó, con el portavoz del PSOE, Mario Jiménez, en el de Miliki, y con Diego Valderas en el de Fofito. Ejemplar.
Puestos
a imitarles habría que salir cantando aquello tan conocido de "hola don
Pepito, hola don Manué, ¿pasó usted ya por caja?, por su caja ya pasé.
¿y vio usted a Valderas? A Valderas yo lo ví, Adios don Pepito, Adios
don Manué", Ya se sabe que "eran dos tipos requetefinos, eran dos tipos
medio chiflaos, eran dos tipos, casi diivinos, eran dos tipos, muy
descaraos, Si se encontraban en San Vicente. o se encontraban en un
cafe. Siempre se oía con voz muy tenue. el saludito de don Manué. Hola
don Pepito, hola, don Manué ¿pasó usted ya por caja? Por su caja ya
pasé...". Eso o aquella otra tan conocida de "Susanita (Diaz) tiene un
sillón, un sillón de mandar, y pone firme a to dios, que critique a
Griñán"- Y asi podríamos seguir homenajeando a esa saga que tan buenos
ratos nos ha hecho pasar a los que ahora estamos en retirada, recordando
aquella otra que decía "mi ...tiene tres...tres...tiene mi..." y pongan
en los puntos suspensivos lo que se les ocurra, que al menos, son tres y
no sólo al primo de Guerrero. Sin embargo hay una canción bastante
menos conocida de Miliki y Rita Irasema que viene al pelo
en este caso y que dice:"Soy como soy, soy perspicaz, listo, vivaz
inteligente y sagaz.
Por eso soy... To-ma-pa-lla, el honorable. Supe
estudiar cómo trincar mucho parné con la mayor legalidad por eso soy...
To-ma-pa-lla, el honorable. Cuestión de saber la regla de tres que
cuando cobras una y una son tres si voy a pagar lo hago al revés con
cuatro y cuatro sumo seis pensándolo bien a quién hago mal si no lo
saben disfrutar ¡ soy hororable! Soy como soy, soy perspicaz, listo,
vivaz, inteligente y sagaz por eso soy... To-ma-pa-lla, el honorable".
Como
ven, los payasos de la tele siguen siendo tan actuales como hace
treinta años. De hecho, muchos de los actuales representantes políticos
andaluces han hecho el paripé democrático durante meses para escenificar
en el edificio del Antiguo Hospital de las Cinco Llagas, reconvertido
este verano en el Circo Price, una Comisión de Investigación que no ha
sido sino una pantomima, una absoluta burla al electorado. Por ello, el
miércoles, cuando el Pleno de la Cámara andaluza vote el dictámen de la
Comisión, que saldrá adelante con los votos del PSOE e IULV-CA, -aunque
la coalición de izquierdas trate de salvr lo muebles a última hora
aportando alguna crítica- los 109 diputados encabezados por Pepe Griñán podrían
cantar a coro, como hacen en Navidad con los villancicos, aquella
canción de los payasos de la tele que decía; "Había una vez,... un circo
que alegraba siempre el corazón..." Así quedaría todo en casa. Habrase
visto la poca vergüenza.