La columna de G. Lendoiro. " Parir con todo a la vista de todos, by señora Dragó"

Que yo sepa, de toda la vida, cuando una mujer da a luz, los protagonistas suelen ser ella y el retoño recién nacido. Esto no es una verdad indiscutible como que después de la vida llega la muerte, pero es algo aceptado por el común de los mortales. Bueno, no por todos. Una personalidad ególatra como la de Sánchez-Dragó tenía que ser el muerto en el entierro en el nacimiento de su cuarto y último (dice él) hijo. Un niño nacido de su relación con una japonesa trendy y mega moderna que opta por parir en casa sin asistencia médica (me refiero a un ginecólogo cerca) y sin medicalizar. Esto es, sin gotero de oxitocina para provocar contracciones y sin epidural para notar el dolor bien. De lo contrario, piensan estas mujeres, no sienten el parto de la misma manera. Y en eso tienen razón. No es lo mismo que te hagan una endodoncia con anestesia que sin ella. Sin ella te puedes morir de dolor y con ella te cagas pero no tanto.

El caso es que el escritor, un señor cultísimo donde los haya y provocador en la misma medida, ha publicado un artículo del nacimiento de su hijo y lo acompaña de unas fotos explícitas de su señora abierta de piernas (claro, está pariendo) con todo su esplendor para deleite o vómito de quién lo mire. El vídeo de Olvido Hormigos en comparación con estas fotos es un capítulo más de Dora la Exploradora. 

El parto es algo natural. Eso es más cierto que nada. Otra cosa es retratar lo natural con una intención no científica de mostrar cómo venimos al mundo sino con el único objetivo de demostrar lo cool y modernos que somos porque, en primer lugar lo hacemos en casa, en segundo, desconocemos y despreciamos la palabra decoro y en tercer lugar lo mostramos todo en su esplendor. Habrá quién disfrute enormemente viendo las fotos que gente hay para todo en la viña del Señor. Al menos han tenido el decoro, eso sí, de no mostrarnos en imágenes cómo concibieron a la criatura (algo también normal). Y, como el parto fue absolutamente natural, me juego el cuello a que la señora Dragó tampoco usó un enema y, se agradece también, que no nos hayan ilustrado con fotos en las que pudiera haberse cagado. También es natural. 

Luego está la parte cool del feliz alumbramiento. Desconozco si las aseguradoras privadas tienen previsto desplazar una ambulancia a las puertas del domicilio que esperen pacientemente a que la mujer dé a luz por si la cosa se complica. O si Dragó ha pagado una ambulancia por su cuenta y riesgo. La SS no lo hace y menos mal porque sería ya de cachondeo que se queden sin sanidad personas indefensas y se atendieran estas peculiaridades de un grupo de modernas que lo están reclamando. Y lo reclaman porque, pese a querer todo natural, no son idiotas y saben que se puede complicar la cosa. Y mucho. De eso saben mucho los ginecólogos que, no en vano, estudian largas carreras que, digo yo, para algo servirán. Así a bote pronto se me vienen a la cabeza preguntas tipo ¿qué pasa si el feto pierde latido y hay que sacarlo de inmediato?, ¿qué pasa si hay un desprendimiento de la placenta, prolapso de cordón...?

Está claro que cada uno hace lo que quiere con su vida, incluso si opta por una manera de parir un pelín irresponsable aunque, eso sí, mega moderna. parece una incoherencia pero no lo es. Antes se paría así. Por eso antes un parto complicado acababa en muchos caso con la muerte del bebé y también de la madre.  Pero esto no parece importarles demasiado a quienes defienden parir en casa. Les digo yo que estoy metida de lleno desde que soy madre en la blogosfera maternal y esta está plagada de madres muy pontificadoras de una crianza, con apego, la llaman, como si el resto de las crianzas que no aceptan sus dogmas tales dormir con los hijos hasta la mili, darles el pecho hasta los seis...fueran crianzas sin apego o rozando el maltrato. Créanme que no les miento, proliferan por la red y se parecen muchísimo en sus discursos a las señoronas jodonas de la sección femenina. Mi tía abuela era de esa "ilustre" organización y decía cosas muy similares sobre el papel de la madre y la crianza. La estoy recordando y se me ponen los pelos de punta. Que Dios la tenga en su gloria.

De todo hay en la viña del Señor. Por cierto, Dragó y señora, que lo cortés no quita lo valiente. Felicidades por el nuevo hijo.

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