El concurso de acreedores supone, según el sindicato, "un nuevo varapalo judicial" y limita a la empresa en cualquiera de sus actuaciones pero, sobre todo, a la hora de dejar sin pagar las "terribles" deudas que acumula.
El sindicato asegura que sólo desea que concluya esta situación que sufren casi 1.000 trabajadores de Transaltozano, "una situación precaria del servicio que presta esta empresa a los pacientes del SESCAM y un servicio inmerecido a la región".
Una vez se inicie el concurso de acreedores, UGT TCM confía en que el Juzgado realice las diligencias oportunas para que los trabajadores puedan cobrar todo aquello que se les adeuda.
"Si el concurso resulta declarado ya que la empresa dispone de unos días para alegar, --ha indicado UGT--, se suspenderá el ejercicio por el deudor de las facultades de administración y disposición sobre su patrimonio, siendo sustituido por los administradores concursales".
Finalmente, el sindicato ha lamentado que los trabajadores tengan que "seguir sufriendo diariamente", mientras desarrollan de manera "más que profesional" sus labores a lo largo y ancho de toda la región, "sin faltar a sus responsabilidades".