El español bajó tres puestos en las últimas vueltas
Los neumáticos hunden a Alonso y Hamilton gana en Canadá y se pone líder del Mundial
domingo 10 de junio de 2012, 22:16h
El británico Lewis Hamilton (McLaren) le arrebató el liderato del Mundial de Fórmula Uno al español Fernando Alonso (Ferrari) al convertirse en el séptimo ganador en siete carreras disputadas, en el Gran Premio de Canadá, en el que el mexicano Sergio Pérez (Sauber) fue tercero. Hamilton ganó en Montreal por delante del francés Romain Grosjean (Lotus) y del Checo Pérez una carrera en la que Alonso -que al igual que los dos anteriores optó por una estrategia a una sola parada- concluyó quinto, tras perder tres puestos en los últimos ocho giros, debido al desgaste de sus neumáticos, que le costaron el liderato.
El inglés comanda ahora el Mundial más
apretado de los últimos tiempos con 88 puntos, dos más que el español y
con tres de ventaja sobre el alemán Sebastian Vettel (Red Bull), que
salió desde la 'pole' y acabó cuarto. Alonso no pudo rematar un
fin de semana en el que Ferrari había causado buenas impresiones desde
el principio, con una jornada de libres, el viernes, en la que sólo
Hamilton había mejorado -por 54 milésimas- su tiempo y antes de firmar
el mejor sábado de la temporada, en una calificación en la que había
logrado el tercero en parrilla y su compañero brasileño Felipe Massa el
sexto.
Sin embargo, el sábado también había evidenciado su buen
momento Red Bull, monoplaza con el que Vettel, que arrancó primero en
Canadá, había firmado la trigésima segunda 'pole' de su carrera.
A
su lado salía Hamilton, ansioso por unir su nombre al de los seis
ganadores anteriores -el inglés Jenson Button (vencedor en Australia),
Alonso (Malasia), el alemán Nico Rosberg (China), Vettel (Bahrein), el
venezolano Pastor Maldonado (España) y el australiano Mark Webber
(Mónaco)- en el Mundial más igualado de los últimos años. Con
cielo azul y sol, la salida fue limpia. Hamilton no atacó a Vettel y
optó por defender su segundo puesto ante Alonso, ganador en 2006 en el
circuito que lleva el nombre de Gilles Villeneuve, mito de Ferrari y de
la Fórmula Uno, fallecido en accidente hace treinta años en Zolder
(Bélgica). Como recuerda un lema inscrito en la línea de meta de la
pista semiurbana, de 4.361 metros, situada en la isla artificial de
Notre Dame, a la que hoy se dieron 70 vueltas para completar un
recorrido de 305 kilómetros.
Tanto Hamilton, como Vettel y
Fernando salieron con neumáticos súper-blandos. El alemán -campeón en
2010 y 2011- fue el primero en parar, en la vuelta 16, una antes que el
inglés, que ganó el título en 2008. Momentos en los que Alonso -campeón
en 2005 y 2006- lideró provisionalmente la carrera, antes de entrar a
garaje en la 19. Alonso entró de nuevo primero en pista por
delante de Hamilton y de Vettel -todos ellos ya con blandas-, y si el
español enseguida se vio superado por el británico, aguantó sin mayores
problemas las embestidas del alemán.
Después de 23 vueltas, Lewis
lideraba con 2,1 segundos sobre Fernando, que seguía presionado por
Sebastian. Y por detrás, el finés Kimi Raikkonen (Lotus) y Pérez, que,
con el compuesto más duro, aún no habían parado, circulaban cuarto y
quinto, respectivamente.
Hamilton marcaba vueltas rápidas y fue
abriendo hueco. En el ecuador de la prueba, después de 35 giros, el
piloto de Stevenage encabezaba con cuatro segundos sobre Alonso, 5.8
sobre Vettel y con una ventaja de 11.7 y 12.5 respecto a Raikkonen y
Pérez; con Webber sexto, a 13.7; y Rosberg en séptima posición, a 16.8. Momentos en los que ya no rodaba el otro español, Pedro de la Rosa
(HRT), retirado en la vuelta 26 por un problema de frenos.
Kimi
paró en la 40 y Pérez una después, cuando Alonso no conseguía reducir
distancias con Hamilton, pero contenía a Vettel. Equidistantes ambos, a
poco más de tres segundos, del asturiano.
Hamilton hizo su
segundo 'pit stop' en la 50, cediendo el primer puesto a Alonso y el
segundo a Vettel. Pero comenzó a volar por detrás de ellos. Con Grosjean
(Lotus) rodando cuarto, eran interesantes por detrás las batallas de
Massa -que acabó décimo- con un brillante Pérez y con Rosberg, sexto al
final. Lewis adelantó a Vettel en la recta posterior a la
horquilla, a falta de ocho para el final. Y una después, cuando paró
Vettel, comenzó su acoso a un Alonso que se defendía con manos de oro
hasta que no tuvo más remedio que ceder, en la 64, el bastón de mando,
en la zona de DRS en la que, dos vueltas después, le adelantó Grosjean.
Pérez también voló en las últimas vueltas y en la penúltima también
superó al astur -que rodaba con el neumático muy desgastado-, al igual
que lo hiciera Vettel en el tramo final de una carrera en la que marcó
la vuelta rápida en el último giro. El mexicano, que brilló en
Malasia, donde concluyó segundo, firmó hoy su segundo podio desde que
pilota en Fórmula Uno y se confirma como una de las revelaciones de la
temporada, tras avanzar esta vez desde el decimoquinto puesto en el que
arrancó hasta el tercero.
El venezolano Pastor Maldonado, que
penalizó cinco puestos en parrilla por cambiar la caja de cambios, y
salió el 22, avanzó nueve puestos en carrera, pero no entró en los
puntos en la séptima prueba de un campeonato emocionante que se
reanudará dentro de dos semanas en tierras españolas, en Valencia, sede
del Gran Premio de Europa.