La práctica totalidad de los
grupos políticos han iniciado una ofensiva parlamentaria que el PP corta de
raíz aplicando el rodillo: quieren que comparezcan en el Congreso no sólo los exgestores
de Bankia, Rodrigo Rato y Miguel Blesa, sino también el gobernador del Banco de
España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, y todos aquellos que han conducido a la
entidad a su quiebra. Pero el PP aplica el 'rodillazo' y lo remite todo a una
comparecencia de Mafo a puerta cerrada en la subcomisión de seguimiento del
Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB).
En definitiva, que el PP
ha decidido enmarcar la comparecencia del gobernador del Banco de España,
Miguel Ángel Fernández Ordóñez, en la subcomisión de seguimiento del Fondo de
Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), cuyas reuniones se celebran a puerta
cerrada en el Congreso, y demorar la fecha al menos hasta después de que el
subgobernador del organismo supervisor,
Javier Aríztegui, dé explicaciones. Los
populares quieren frenar así la ofensiva parlamentaria para crear una comisión de
investigación sobre la quiebra de Bankia.
"No son convenientes ahora esas
comparecencias", alega por todo argumento el portavoz del Grupo Popular,
Alfonso
Alonso.
"No es conveniente
en estos momentos", es la frase más repetida en el PP para explicar,
vanamente, por qué el Gobierno y su grupo, aprovechando su mayoría absoluta,
quiere hacer correr un tupido velo sobre el escándalo de Bankia. Con esa frase
se niega que
Rodrigo Rato,
Miguel Belsa y otros den explicaciones sobre lo que ha pasado con
la cuarta entidad financiera de España. Y, así, con esa frase ha frenado este
martes en la Mesa del Congreso la petición de IU-ICV para que se debata en
pleno la creación de una comisión de investigación.
La izquierda plural
tendrá que conformarse con la interpelación que le ha formulado al respecto al
ministro de Economía,
Luis de Guindos, la próxima semana, a la que seguirá una semana después una resolución que será rechazada. Así de fácil. Pero IU no se
conforma y está preparando la presentación de una denuncia ante la Fiscalía
General del Estado para que se investigue la gestión de Bankia, con lo que el tema, además, se judializa.
Y hablando de denuncias, también está preparando una la UPyD de
Rosa Díez, que ha tomado la decisión de
llevar
a los tribunales no sólo a los gestores de Bankia, Rodrigo Rato, Miguel Blesa y
otros, sino también a los políticos que los nombraron. UPyD, como otros grupos
parlamentarios, ha exigido también la creación 'ya' de una comisión de
investigación sobre el caso.
Ahora bien, paralelamente
a todo lo anterior, y demostrando la falta de transparencia con la que el
Gobierno de
Mariano Rajoy quiere afrontar la mayor quiebra financiera de
nuestro país hasta la fecha, la comisión de Economía ha evitado pronunciarse
sobre la comparecencia parlamentaria de
Miguel Ángel Fernández Ordóñez, y ha
recurrido al truco de remitirla a la subcomisión del FROB, que se reúne este
miércoles por la tarde.
Como decimos, la decisión
del Gobierno, por el momento, al menos, es evitar que comparezca Rato, y en
cuanto al gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, que
lo haga 'cuando corresponda' en la subcomisión de seguimiento del Fondo de
Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), a puerta cerrada.
Pero el Grupo Popular se
está viendo cada vez más solo en su cerrazón: este mismo martes el peneuvista
Josu Erkoreka se ha sumado a la petición socialista para que comparezcan los
exresponsables de Bankia, Rodrigo Rato, Miguel Blesa y
José Luis Olivas. El PP,
como decimos, se opone.
Como dato anecdótico, todo está ocurriendo el día en que se ha conocido que el director financiero de
Bancaja,
Aurelio Izquierdo, cuenta con
derecho a una pensión de 13,9 millones
de euros, según consta en la memoria de las cuentas consolidadas de 2011 de
Banco Financiero y de Ahorros (BFA), matriz de Bankia. Y también, el día en que
se ha conocido que
la consultora Deloitte alertó de las cuentas de BFA-Bankia
aún con
Rodríguez Zapatero en el poder.