Awar Al Awlaki
El imán de origen estadounidense vinculado a Al Qaeda, asesinado por el Ejército yemení
viernes 30 de septiembre de 2011, 11:24h
El clérigo radical Anuar al Awlaki, líder de
Al Qaeda en la península Arábiga y uno de los supuestos terroristas más
buscados por Estados Unidos, murió hoy en Yemen durante un ataque aéreo estadounidense.
El Ministerio de Defensa yemení dio cuenta en
un escueto comunicado del fallecimiento de Al Awlaki, de nacionalidad
estadounidense y origen yemení, lo que fue confirmado después por el
Gobierno de EEUU.
Aunque en un principio ninguna fuente oficial
confirmó las circunstancias del suceso, finalmente funcionarios de
Washington precisaron que Al Awlaki murió en el ataque de un avión
estadounidense no tripulado y armado con misiles Hellfire.
Fuentes militares yemeníes, por su parte, detallaron previamente a Efe
que el clérigo murió por un ataque estadounidense durante la madrugada
del viernes en la provincia de Shabua, ubicada a 570 kilómetros al
sureste de Saná.
Junto con Al Awlaki, cuyo cadáver fue
reconocido, también fallecieron otros tres miembros de la organización
terrorista, entre ellos un ciudadano estadounidense de origen paquistaní
identificado como Samir Jan, agregaron a Efe fuentes de seguridad y
tribales. Durante meses, el influyente dirigente de Al Qaeda
había esquivado la persecución de las autoridades estadounidenses y
yemeníes, que desde hace años mantienen una estrecha colaboración en la
lucha contra el terrorismo.
A principios de mayo pasado, salió
ileso de un ataque aéreo perpetrado también por EEUU en la misma
provincia de Shabua, considerada refugio de numerosos miembros de Al
Qaeda, que a veces cuentan con el apoyo de tribus locales.
En
abril de 2010, Estados Unidos emitió una orden de captura sobre Al
Awlaki, a quien quería vivo o muerto después de que la CIA lo incluyera
en una lista de terroristas a los que podía matar.
El líder de Al
Qaeda en la península Arábiga estaba acusado de haber contactado con el
comandante estadounidense Nidal Malik Hasan, que mató a trece personas
en noviembre del 2009 en una base de Texas.
Además, el propio
clérigo admitió haber adoctrinado al nigeriano Faruk Abdulmutalab, quien
intentó hacer estallar un artefacto explosivo durante un vuelo que iba a
aterrizar en Detroit en diciembre de 2009.
Nacido en suelo estadounidense, Al Awlaki residía desde el 2002 en Yemen
y se sospechaba que se había refugiado en la provincia de Shobua ya que
él y su familia pertenecían a la tribu Awalek, una de las más poderosas
de la zona.
El dirigente se había convertido en la figura más
notoria de la rama yemení de esa organización terrorista, Al Qaeda en la
Península Arábiga (AQPA), que surgió a comienzos de 2009 a raíz de una
reestructuración de ese grupo que absorbió los cuadros en Arabia Saudí. Sus mensajes llegaron a ser tan populares como los del ya difunto
líder de Al Qaeda Osama bin Laden y en ellos defendía los atentados
cometidos por Al Qaeda contra los estadounidenses en venganza por la
muerte de musulmanes en Irak, Afganistán y los territorios palestinos.
El interés de EEUU para detener a este dirigente chocó en ocasiones con las autoridades del Yemen que, pese a perseguirlo, no parecían muy dispuestas a extraditarlo por su condición de yemení.
Según las autoridades de ambos países, la red de Al Qaeda dispone de campos de entrenamiento en Yemen, especialmente en las montañas del sur del país, donde se cree que centenares de combatientes de ese grupo están escondidos.
La muerte de Anuar al Awlaki se produce en un momento en el que Yemen
vive una revuelta contra su presidente, Ali Abdalá Saleh, iniciada en
enero pasado y recrudecida en las últimas semanas con la muerte de más
de un centenar de personas. En ese contexto, EEUU ha pedido a
Saleh que inicie cuanto antes el traspaso pacífico del poder, a lo que
el gobernante se ha comprometido aunque sin resultados por el momento.