Los insultos en televisión ¿suben la audiencia?

Quizá, más que subir la audiencia, provocan expectación, rumorología y dan de que hablar durante muchos programas sensacionalistas. Y si no que se lo digan a Aída Nizar y a Jorge Javier Vázquez, expertos en montar circos en directo. El presentador de Supervivientes, el reallity de Telecinco, no se ha quedo corto a la hora de calificar a la concursante y ex-Gran Hermana cuándo ésta preguntó a una de sus contrincantes -que no compañeras, porque ahí el compañeritos no existe, prima el espectáculo antes que la amistad- sobre Ortega Cano. Sin saber que el torero se encuentra en el hospital recuperándose por el accidente que tuvo hace unas semanas, Aída Nizar preguntó a Rosa de Benito lo siguiente: "¿Crees que Ortega Cano está siguiendo tu concurso? Imagínate que le pasa algo, ¿dónde le gustaría ser enterrado? ¿si muere, qué pasará con sus hijos? ¿crees que estará viendo el concurso?" Y el presentador, ante las inquisiciones de la polémica 'actriz' televisiva, decidió calificarla como si no hubiera un mañana. Sus palabras más bonitas en referencia a lo que le provocaba a Jorge Javier fue "asco, bochorno, vergüenza, consternación". Y luego el tono subió hasta llegar a insultos como "enferma" e "hija de puta".  No contento con eso, decidió explayarse a sus anchas con la madre de Nízar, burlándose de ella y descalificándola en directo. ¿Hasta dónde queremos llegar? Muchos canales de televisión y, entre ellos Telecinco, se ha convertido en un espacio donde la educación ha quedado enterrada en el subsuelo y donde se puede calificar de im-presentable casi todo aquello que tenga lugar en sus respectivos platós.