www.diariocritico.com
28 años de Autonomía (23F y 25F)

28 años de Autonomía (23F y 25F)

jueves 24 de febrero de 2011, 23:30h
Este 25 de febrero se cumplirán 28 años, ya 28 años, desde la aprobación del Estatuto de Autonomía de Castilla y León, y la consiguiente puesta en marcha de la Comunidad Autónoma. Tan cerca cómo está la fecha de este 23 F., recordado insistentemente tras 30 años, pasará tal vez más desapercibido. Pero no dejará de ser una oportunidad para darle una vuelta al asunto de nuestra autonomía. Y creo yo que viene muy al pelo esta vez hacer un poco de memoria y analizar la cuestión con una perspectiva que no ha sido muy habitual. Casi me da un poco de “yuyu” plantearlo así, pero ahí va, y ojalá se entienda bien: es indudable que el 23 F tuvo resaca y que determinados temas del desarrollo constitucional que estaban abiertos se reorientaron de inmediato; existía la sensación, o la convicción, de que la implantación del modelo autonómico generaba una incertidumbre indeseable y que eso había servido de alimento, entre otros, a la causa involucionista. De modo que una vez elegido Calvo Sotelo como Presidente del Gobierno, y expresada la voluntad de los principales partidos nacionales (la UCD y el PSOE por aquel entonces), se desarrolla un rápido proceso de acuerdos, con un fruto inmediato, como fue el encargo a una Comisión de expertos de un Informe sobre las opciones de cierre y de estabilidad del Estado de las Autonomías.
 
Invito a hacer hemeroteca y a releer el entonces famoso Informe Enterría (el conocido profesor de Derecho Administrativo D. Eduardo García de Enterría presidió aquella Comisión). En él se recomienda no avanzar en el proceso de referéndum autonómico en más Comunidades (ya se había hecho en Andalucía) y se paran los previstos en Valencia y Canarias; en él se propone un modelo institucional con gobierno y parlamento en cada Comunidad y con administración provincial usando las Diputaciones; en él, en lo que nos atañe, se diseña el mapa de Castilla y León con León dentro, se recomienda que Segovia sea añadida por una ley orgánica especial, y que Cantabria y La Rioja se constituyan en Comunidades diferenciadas. Entre otras cosas.

Poco después (mayo del 81) Calvo Sotelo y Felipe González firman un pacto autonómico que recoge sustancialmente esas recomendaciones. Ahí se inicia el camino hasta febrero del 83, cuando se aprueba el Estatuto de Castilla y León. Repase quien lo desee aquel Informe y aquel Pacto; repase luego la versión inicial de Estatuto; y haga su propio análisis. Seguro que se entenderá mejor lo que quiero decir. Ya se que luego el proceso de desintegración de la UCD no facilitó tramitar nuestro Estatuto con la agilidad necesaria y que las elecciones de octubre del 82 y la nueva y amplia mayoría del PSOE hicieron el resto. De eso podemos hablar otro día, porque es largo e interesante. Pero aquel punto de partida es tan objetivo como evidente.
  
¿Quiero decir con ello que hay una relación histórica de causa-efecto entre el 23 F-81 y el 25 F-83? En absoluto. Creo que se hubiera llegado al mismo resultado, quizá más tarde y por otro camino. Pero no me cabe duda de que el ambiente post 23 F animó a un consenso que tal vez pudo, y debió, producirse antes, especialmente en un tema tan sensible como era, y lo sigue siendo, la organización territorial del Estado. Y la historia está para aprender.

Jesús Quijano. Diputado PSOE.
¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (2)    No(0)

+
0 comentarios