Para compensar a La Caixa por el mayor valor del negocio bancario traspasado, 9.480 millones de euros, Criteria deberá dar a la entidad acciones por un importe de 2.009 millones, que saldrán de una nueva ampliación de capital. CaixaBank no tendrá inmuebles, lo que le facilitará tener un core capital del 10,9%, según la actual normativa de solvencia Basilea II.
"La nueva configuración del grupo permitirá a La Caixa mantener su liderazgo en el sistema financiero y aprovechar las oportunidades de crecimiento que se pueden presentar en los próximos años", señala el comunicado enviado por el grupo.
El presidente de la caja,
Isidro Fainé, se mostró convencido de que han escogido "la opción que mejor se adapta a los nuevos retos del entorno financiero internacional y a la historia, valores y visión de nuestra institución, que preserva íntegramente su personalidad como caja de ahorros".
Gonzalo Cortázar, consejero director general de Criteria, manifestó que sus accionistas "se convertirán en accionistas de una entidad financiera líder, solvente y con gran perspectiva de futuro".
CCOO ha supeditado su apoyo a la transformación de La Caixa a que mantenga "su compromiso social" a través de la actividad financiera y las condiciones laborales de sus empleados. UGT "no ve bien" la transformación de la caja en banco ya que supondrá "la entrada de capital privado, que será el que participe de los beneficios" y no la Obra Social y la ciudadanía.
Ya es oficial... La Caixa se convierte en CaixaBank
Isidre Fainé, Santander y Telefónica, entre los 'Premios Dirigentes' 2010