Por contra, desde el Ejecutivo central se quiere limitar la capacidad catalana de emitir deuda
El portavoz del Govern, Francesc Homs, ha explicado en rueda de prensa tras el Consell Executiu que la estabilización financiera de la Generalitat y la aplicación de la Disposición Adicional Tercera del Estatut serán claves durante este 2011, además de "todo lo que afecte al crecimiento económico".
Además, en la negociación con el Estado primará conseguir la participación mayoritaria de las instituciones catalanas en los aeropuertos catalanes -especialmente el de Barcelona-, que "todavía son de interés general".
Así se reflejará en las comisiones de negociación entre Estado y Generalitat, cuya parte catalana liderará el portavoz de CiU en el Congreso, Josep Antoni Duran, por lo que asistido al Consell Executiu.
Homs ha justificado así la necesidad de que Duran asistiera a una reunión del Govern pese a no formar parte de él, dado que será clave en las negociaciones con el Estado.
En cuanto a una nueva financiación de Cataluña, ha reiterado que el Govern aspira a plantearla en 2012 ante el Gobierno que salga de las próximas elecciones generales. Así, se considera un error si plantear ahora un pacto fiscal porque, ante la crisis, podría ser un acuerdo "para salir del paso".
Culpa al Ejecutivo de Zapatero
Según el portavoz del Govern, no se ha fijado fecha para una reunión entre los presidentes de la Generalitat y del Gobierno, Artur Mas y José Luis Rodríguez Zapatero, y pueden concretarlo en las próximas semanas.
Homs también ha asegurado, sobre la gestión de la crisis económica, que "estamos donde estamos por las decisiones tomadas por el Partido Socialista", porque es quien gobierna en España y quien hasta hace 15 días lo hacía en Catalunya.
En rueda de prensa tras el Consell Executiu, Homs ha recalcado que "el ritmo de generación de gasto del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero no es cosa de hace cuatro días", indicando que CiU lleva tiempo reclamando contención y un cambio de rumbo en la política económica de la administración.
"Advertíamos de que no se podía ir de aquella manera", ha recalcado, indicando que la demanda que hacía CiU en defensa de la austeridad y el sentido común en el gasto público es la que está impulsando desde la Generalitat.
Homs ha criticado cómo el Gobierno central ha supervisado las cuentas de Catalunya, ya que en la última reunión del Consejo de Política Fiscal y Financiera en noviembre, dio por buenas las previsiones de déficit del tripartito.
El propio presidente de la Generalitat, Artur Mas, admitió días atrás que el déficit de la Generalitat en 2010 podría superar los 7.000 millones, entre dos y tres veces más de la cifra que dio en el citado consejo.
Homs ha lamentado que el secretario de Estado de Hacienda, Carlos Ocaña, haya señalado que el Gobierno central podría impedir a la Generalitat nuevas emisiones de bonos si no cumple con el déficit: "Suena a advertencia. No quiero pensar que suene a amenaza".
Cataluña pagará los errores de los "amigos" tripartitos
Y es que en sentido contrario al rumbo que toma la Generalitat, el secretario de Estado de Hacienda y Presupuestos, Carlos Ocaña, ha adelantado este martes que el Gobierno va a limitar las emisiones de deuda de la comunidad autónoma, tras el anuncio del nuevo Ejecutivo autonómico de que la situación financiera de esta comunidad es peor de lo que se pensaba. Una situación creada, por cierto, por el tripartito, considerado como "amigo" del Ejecutivo de Zapatero.
El anuncio coincide en el tiempo con las declaraciones del presidente José Luis Rodríguez Zapatero, afirmando que "si no cumple con el control del gasto público, actuará el Gobierno". El déficit catalán rondará en 2010 el 3,6% del PIB de la comunidad, hasta los 7.000 millones de euros.
La cifra, "como parece que va a ser", ha admitido Ocaña este martes, rebasa ampliamente el objetivo del 2,4% al que debían atenerse todas las autonomías. Ese incumplimiento habilita a Hacienda a impedir que Cataluña se endeude a corto plazo, un veto que se extenderá al resto de comunidades incumplidoras. Según ha explicado Ocaña, se trata de "una manera por la que el sistema español establece una forma de disciplina a las autonomías".
El control del déficit del Estado sí se cumplirá
Ocaña, tras intervenir en una jornada sobre fiscalidad organizada por la Asociación para el Progreso de la Dirección (APD), ha asegurado que el 9,3% previsto para todo el Estado se va a alcanzar "con holgura". Según ha añadido, en la actual coyuntura económica es fundamental que las comunidades autónomas "hagan lo que tienen que hacer" en materia fiscal y cumplan con sus objetivos de déficit.
En junio, la deuda del Ejecutivo catalán era de 29.503 millones, el 16% del producto interior bruto catalán, aunque esta se ha incrementado tras recibir un préstamo sindicado de 1.000 millones y una emisión de deuda por el mismo importe en los mercados mayoristas.
El Gobierno catalán emitió hace apenas dos meses bonos a un interés del 4,75% en un año para captar 3.000 millones de euros que necesitaba para garantizar sus necesidades de financiación del pasado ejercicio.