Cajacírculo: “Yo no soy tonto”

La Caja del Círculo de Obreros Católicos de Burgos  (Cajacírculo) siempre ha sido una entidad especial. Por su vinculación a la Iglesia, dispone de un “status” diferenciado y siempre ha ido por libre, siendo la primera que pasó olímpicamente de participar en fusiones con otras cajas de la comunidad. Otro carácter atípico de Cajacírculo es que sus consejeros no perciben ninguna remuneración ni dieta por asistir a las reuniones de sus órganos de gobierno.

Esto último puede cambiar después de su adhesión al SIP-Grupo Caja Tres promovido conjuntamente con la Caja de Ahorros de la Inmaculada (CAI) y Caja Badajoz, en el que la caja burgalesa participa con un 34 por ciento. Dado que los consejeros de CAI y Caja Badajoz han percibido siempre remuneraciones y/o dietas,  algunos consejeros de Cajacírculo se preguntan si, una vez que las tres entidades han establecido una caja común, no estarán haciendo el primo si siguen sin percibir ninguna compensación económica por cumplir las mismas funciones que sus socios.

Remedando el “Yo no soy tonto” que utiliza como slogan publicitario la cadena Media Markt, esos consejeros piensan que estarán haciendo el tonto si siguen sin cobrar. Tampoco piden salarios como los establecidos para el nuevo presidente de “Caja España y de todos los Santos”. Simplemente unas mínimas dietas por asistir a las reuniones de los órganos de la entidad. Que tampoco parece que sea mucho pedir.