Según el presidente de CiU en el Congreso, los socialistas les piden que les "aprieten" a la vez que les critican por su posicionamiento
"Yo no estoy aquí para hacer de malo ante los sindicatos", ha expuesto Duran, a la vez que ha dicho que las 48 horas que ha dado el Gobierno para intentar acordar una reforma laboral con los partidos políticos es muy poco tiempo para negociar. Según Duran, los temas en los que al PSOE le gustaría que CiU apretase son los relativos a negociación colectiva o a las condiciones para el despido.
El político demócrata-cristiano cree que las negociaciones para alcanzar un acuerdo no deben ser retransmitidas minuto y minuto, y ha asegurado que se trata de una decisión que debe adoptarse de forma "urgente", puesto que así la esperan los mercados. Para Duran, España vive en estos momentos una situación "delicada y crítica", que podrá superarse si se hacen los deberes.
Duran sostiene que en estos momentos el Gobierno central ha perdido su capacidad para tomar decisiones, puesto que la economía española está "vigilada" y el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ya no puede imponer sus directrices.
Al preguntársele sobre la eventual circunstancia de que España pueda ser expulsada del euro, respondió: "No es tan fácil, no estamos en esta fase". También ha negado, frente a lo que publicó la edición germana de Financial Times, que España esté "a punto" de ser intervenida, y ha dejado claro que la situación económica española no es en estos momentos comparable con la griega.
Por otra parte, Duran ha dejado claro que pese a las insinuaciones públicas que se han hecho durante los últimos años a él mismo y a CiU para que gobiernen en el Estado, la federación lo declina y dice no estar ahora por esta labor. Y es que, según ha amnifestado, la federación nacionalista tendrá "mucho trabajo" de materializarse la victoria que dan las encuestas sobre intención de voto en Cataluña.