Estas mismas fuentes precisaron que la dentención se ha producido en el marco de una operación dirigida por la Guardia Civil y que los dos presuntos terroristas iban armados en el momento de su arresto en una zona en el monte de la citada localidad gala.
Otras fuentes cercanas a la operación añadieron que el escondite de la banda al que se dirigían apenas contaba con 3.000 euros y que, desde hacía meses, estaba controlado por el Instituto Armado.
Se trata de un hombre y una mujer y, a falta todavía del cotejo oficial de huellas, la identidad de ella podría ser Zaider Iruburru.