José Botelho de Vasconcelos, quien también es el ministro del Petróleo de Angola, dijo que tanto productores como consumidores estaban cómodos con los precios del crudo entre 75 dólares y 80 dólares el barril, y que un alza de precios podría frenar a la economía global.
"Creo que un precio equilibrado siempre es mejor", dijo Botelho de Vasconcelos el domingo por la noche, antes de abordar un vuelo hacia Brasil, publicó Reuters.
"Ustedes saben que, si es necesario, algunos países están abiertos a inyectar más petróleo en el mercado y eso se hará".
Cuando se le preguntó si un alza del precio del petróleo a 100 dólares por barril inevitablemente llevaría a la OPEP a elevar la producción en su encuentro del 22 de diciembre en Luanda, Botelho de Vasconcelos respondió: "Pienso que sí. Debemos mantener el equilibrio".
La Organización de Países Exportadores de Petróleo, que controla alrededor de un tercio de la producción mundial de crudo, ha estado limitando la producción desde septiembre del 2008 pues la crisis financiera afectó a la demanda y presionó a los precios.
Antes de incrementar la producción, la OPEP primero tendrá que asegurar que los fundamentos del mercado del petróleo, en términos de oferta y demanda, estén equilibrados, dijo Botelho de Vasconcelos, agregando que los inventarios de crudo seguían altos mientras que el dólar estaba débil.
"Sabemos que el dólar se ha depreciado y que la OPEP ha jugado un papel extremadamente importante en la recuperación económica global", dijo.
"Somos conscientes de que si bien los inventarios de petróleo han estado bajando, todavía están en cierto nivel".
El precio del petróleo <CLc1> llegó la semana pasada a 82 dólares, máximo en un año, en un repunte que para muchos empezó por las previsiones de reactivación económica y por la debilidad del dólar, más que por un ajuste del equilibrio entre la oferta y la demanda del crudo.