En una entrevista con el diario español "Él País", Correa también habla sobre las iniciativas de su gobierno para hacer frente a la vuelta de muchos de los inmigrantes ecuatorianos desde España.
En el ámbito regional, Rafael Correa asegura que su país tiene excelentes relaciones con todos los países.
"Probablemente -dice- he viajado más veces a Brasil que a Venezuela. He viajado muchas más veces a Argentina. Si quieren buscar ejes, búsquenlos y encuéntrelos".
"El que haya un eje -prosigue- no tendría nada de malo, pero explícitamente no existe ninguno. Se habla mucho y se confunde populismo con popular (...).
El mandatario ecuatoriano también se refiere a la coyuntura financiera regional y propone constituir "un fondo de reservas del Sur que sirva para respaldar las monedas nacionales, las crisis de balanzas de pago, las crisis fiscales".
"Es -subraya- lo que estamos proponiendo a América Latina y lo que hay decisión de construir. El Banco del Sur, financiado con fondos de la región, va a estar operativo ya mismo".
Recuerda que pese a haber defendiendo la dolarización, daría la bienvenida a una moneda regional, como existe en la Unión Europea.
"Qué mejor que lograr una unión monetaria latinoamericana. Y eso también se esta satanizando. Insisto, eso no implica la salida de la dolarización", precisa.
Respecto a los inmigrantes ecuatorianos en España, recuerda que "hay 50.000 parados ecuatorianos en España y, por supuesto, si nos regresan los 50.000, no vamos a poder atenderlos".
"Ahora regresan unas 5.000 familias al año; estamos preparándonos para que aumente esa tendencia, de 5, a 8 o 10.000 familias", asegura Correa.
El presidente de Ecuador reconoce, no obstante, que el problema que "se vive es muy grave y no podemos resolver el paro en España" y reconoce que se han desplomado las remesas de los emigrantes, como también ha pasado con el precio del petróleo.
Sobre las inversiones españolas en Ecuador, el presidente de Ecuador cree que ante el panorama de crisis no se verán afectadas.
"Son empresas bastante sólidas que, incluso, han presentado un programa de inversiones, que están cumpliendo. Me refiero a Repsol, a Telefónica. Esperamos que cumplan los acuerdos".
Sobre política nacional y tras su triunfo en las elecciones del domingo pasado, Correa indica que no se niega a hablar con los partidos de la oposición y aclara lo que "no voy a hacer es hablar con Lucio Gutiérrez personalmente. O con Álvaro Noboa. Sería como traicionar a mis electores".
Correa considera que la Cumbre de las Américas marcó un hito en las relaciones con Estados Unidos, "básicamente -dice- por la actitud personal del presidente Obama: muy abierto, muy cordial, muy interesado en el problema de la región, lo que nos hace presumir un cambio importante en la relación de América Latina con EEUU.
Sobre el liderazgo de Brasil en la región, Correa reconoce que "nadie puede dudar de la importancia de Brasil. Es una de las 10 economías más grandes del mundo, así que si adopta un liderazgo, en buena hora, con tal de que sea en el marco del más profundo respeto para los demás países de la región", que es "lo que siempre ha habido" por parte del presidente Lula, concluye.