El BCV garantiza que la reconversión no alterará el valor relativo de los ingresos, gastos, bienes o deudas, cualquiera que sea su naturaleza, así como tampoco la relación de los precios del país con los del resto del mundo. “Todo monto expresado antes del 1 de enero de 2008 será equivalente al importe monetario expresado en bolívares fuertes”, aclaró Parra.
Destacó también que la conversión del bolívar será gratuita para el consumidor y usuario, quien quedará exento de pagar por gastos, comisiones y honorarios.
El Banco Central se comprometió a mantener “por varios años” el proceso de sustitución de los viejos billetes y monedas por los nuevos. “La población y todos los agentes económicos pueden tener la plena seguridad de que el BCV garantizará el suministro suficiente y la distribución oportuna de los nuevos billetes y monedas que les corresponde emitir para asegurar el adecuado desempeño económico nacional”, aseguró Parra.
La etapa de transición del proceso de reconversión monetaria decretado por el Ejecutivo nacional durará aproximadamente seis meses, período durante el cual coexistirán la actual y la nueva familia de monedas y billetes.
El directorio en pleno del Banco Central de Venezuela explicó en cadena nacional el procedimiento. Gastón Parra, presidente del BCV, aseveró que con la reconversión se busca fortalecer la moneda nacional y reafirmar el objetivo de la estabilidad económica,
“fundamentado en la ejecución de un conjunto de políticas consistentes en el tiempo, orientadas a favorecer un crecimiento armónico de la economía y el desarrollo económico social del país”.
Señaló Parra que con la reconversión monetaria se logrará una mayor eficiencia en el sistema de pagos a través del manejo de cifras más pequeñas. Esto facilitará tanto las operaciones comerciales como el cálculo de todas las transacciones económicas.
Desde el 1 de octubre de 2007, los precios de bienes y servicios se expresarán en bolívares actuales y en bolívares fuertes, para facilitar el aprendizaje por parte de la colectividad.
El BCV garantiza que la reconversión no alterará el valor relativo de los ingresos, gastos, bienes o deudas, cualquiera que sea su naturaleza, así como tampoco la relación de los precios del país con los del resto del mundo. “Todo monto expresado antes del 1 de enero de 2008 será equivalente al importe monetario expresado en bolívares fuertes”, aclaró Parra.
Destacó también que la conversión del bolívar será gratuita para el consumidor y usuario, quien quedará exento de pagar por gastos, comisiones y honorarios.
El Banco Central se comprometió a mantener “por varios años” el proceso de sustitución de los viejos billetes y monedas por los nuevos. “La población y todos los agentes económicos pueden tener la plena seguridad de que el BCV garantizará el suministro suficiente y la distribución oportuna de los nuevos billetes y monedas que les corresponde emitir para asegurar el adecuado desempeño económico nacional”, aseguró Parra.