Como venganza o como prueba de fuerza. La cuestión es que el león herido siempre puede dar zarpazos peligrosos y es lo que ocurriría con ETA si se cumplen los peores pronósticos. En todo caso, lo que esto indica, es que las fuerzas de seguridad no bajan la guardia por mucho que la detención de
Txeroki sea una gran noticia, sin ningún 'pero'.
Hay que recordar que este golpe a la banda es el tercero en pocos meses. Tras la ruptura de la tregua en junio de 2007, en un solo mes, fue detenido el entonces jefe la logística de ETA,
Juan Cruz Maiza Artola. Ya en este 2008, la gran noticia llegó en mayo con el arresto de la cúpula de la banda. Cayó quien se le suponía como el máximo dirigente,
Francisco Javier López Peña, alias '
Thierry', junto a otros tres etarras.
Precisamente la caída de la cúpula supuso que Txeroki se hiciera con el control total de la banda. Al parecer, hasta ese momento, 'Thierry' tenía que dar el aprobado a todos los atentados planeados por mucho que el joven Garikoitz Aspiazu (Txeroki) llevaba 5 años como jefe de comandos. Su ahora posible sucesor,
Aitzol Iriondo, 'Gurbitz', ha sido quien ha estado facilitando explosivos y ejercía de lugarteniente de 'Txeroki'. Algunas fuentes aseguran que este etarra es aún más sanguinario y que exige pruebas de 'carácter' a sus comandos, a través, lógicamente, de atentados.
Y si 'Gurbitz' se ha hecho con la jefatura militar de ETA, veteranos terroristas controlan ahora el aparato político. Hay quien sitúa a '
Dienteputo' (
José Luis Eciolaza, de 48 años) como jefe absoluto de la banda terrorista. '
Zulos' o '
Pastor', cuyo nombre es
Juan Cruz Maitegi Bengoa, de 63 años, y hombre cercano a
Josu Ternera, sería el líder de ETA política. Sólo algunos piensan que 'Dienteputo' sea precisamente el 'número dos' de
Maitegi Bengoa. Algunas fuentes suman a ese grupo a otro veterano,
Eusebio Arzalluz, alias '
Paticorto'. Los tres habían permanecido durante muchos años en Latinoamérica.
Dudas sobre cómo se consiguió dar con Txeroki
Ayer lunes, el ministro
Rubalcaba, explicó que las Fuerzas de Seguridad consiguieron dar con el paradero de Txeroki gracias al seguimiento de un coche robado con placas de matrícula falsas. En concreto, las placas que portaba el coche de Txeroki correspondían a otro vehículo matriculado hace años, lo que hacía imposible que fueran de un Peugeot 207 prácticamente nuevo.
Pero también, aunque no contradiciendo esta otra pista, se apunta a que la intervención del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) ha sido determinante, rastreando correos electrónicos del terrorista. Rubalcaba, al ser preguntado por esta cuestión, confirmó que el uso de cibercafés es habitual en etarras y fue una pista clave.
Según El Mundo, ha sido la National Security Agencia (NSA) estadounidense, un servicio de espionaje especializado en las investigaciones en Internet, la culpable del rastreo de estas cuentas de correo electrónico y la que pasó la información al CNI.