A diez días de disputarse la final de la Davis los jugadores ya visitaron el estadio
El equipo argentino comenzó a probar las instalaciones en un estadio aún en obras que tendrá que apurar los arreglos para llegar a tiempo.
Entre polvo, pintura fresca, listones de madera en el suelo y todo tipo de utensilios de carpintería, el equipo argentino de tenis salta a tomarle el pulso a la cancha en la que se disputará la final del torneo, entre el 21 y el 23 de noviembre, en Mar del Plata
Nalbandian, Acasusso y Calleri pelotearon un poco y hasta jugaron un fútbol tenis, con una sensación que se mezclaba entre la felicidad de estar tan cercana la posibilidad de lograr la ensaladera y de bronca por no poder entrenar con normalidad a tan pocos días de la final, ya que las instalaciones cubiertas del estadio Islas Malvinas, que en 1978 recibió algunos de los partidos disputados en el Mundial de fútbol que ganó Argentina, no están a punto todavía.
Mientras fuera del estadio los más fanáticos desde el sábado comenzaron a realizar la fila para conseguir las entradas, con precios que oscilan entre 400 y 800 dólares-, dentro el movimiento es frenético para tenerlo todo a punto.
Decenas de trabajadores se afanan por terminar de instalar los asientos -la mayoría sin respaldo-, pintar, colocar los marcadores y la silla del juez, ultimar el cableado eléctrico, ajustar las medidas de seguridad y todos los detalles de un encuentro de tan alto nivel.
El estadio, que tenía una capacidad original de 7.000 espectadores, ha sufrido en las últimas semanas múltiples reformas con el objetivo de aumentar hasta las 9.500 localidades.
Los partidos se jugarán en pista rápida, montada en una base de madera de 24 milímetros sobre la que se han aplicado diez capas de resinas acrílicas, explicó a Efe Soledad Lokman, de la empresa encargada de su instalación, la española Composan.
Es de formato 'Composport Cushion', calificado por la Federación Internacional (ITF) con el grado 5, el máximo en las pistas rápidas, de modo que es más veloz que las que se usan en la mayoría de torneos de pistas sintéticas de EE.UU.
Éste es el mismo modelo de pista sobre el que se juega el Open de Castilla y León disputado en El Espinar (Segovia), el campeonato más importante de España en pista rápida, y el mismo sobre el que entrena el manacorí en su casa cuando necesita ejercitarse en esa categoría.
El equipo argentino se encargará, en estos días, de "medir la velocidad" de la pista y comprobar si es necesario añadir alguna capa más "para hacerla más rápida", agregó Lokman.
El técnico español José Manuel Delgado fue el encargado de asegurarse de que todos los detalles técnicos fueran correctos en el montaje de la pista, que se alargó por casi dos semanas debido a un problema de humedad.
El equipo español de la Copa Davis, integrado entre otros por David Ferrer, Feliciano López o Fernando Verdasco, viajará el próximo jueves a Argentina para preparar el torneo en territorio 'enemigo'.