www.diariocritico.com
ARCO, el arte de asombrar

ARCO, el arte de asombrar

viernes 16 de febrero de 2007, 09:38h
La Feria Internacional de Arte Contemporáneo asombrar, asombra, para bien o para mal. Sillas robóticas, escaleras que suben a ninguna parte, motocicletas hechas de cartón, tiburones que se suspenden en el aire…ARCO es de todo menos un sitio aburrido. Y es que allí la indifercia no se lleva. Un año más la Feria Internacional de Arte Contemporáneo ha llevado a Madrid el arte más vanguardista y sugerente. La creación artística es tan libre que a muchos seguramente se les pasará por la cabeza la pregunta de: "¿Y esto es arte?" Para comprobarlo tienen hasta el día 19. La entrada general para el público tendrá un coste de 30 euros, incrementándose a 60 euros si además, se incluye el catálogo oficial. El precio para los estudiantes será de 20 euros.
Diciendo que ARCO es un sitio atípico para los "no muy creyentes" no se descubre América. Aún así, los que no sean fieles seguidores del arte, ya sea vanguardista o más clásico, seguramente quedarán asombrados con todo lo que podrán ver por los pabellones 7,8 y 9 de Ifema. Desde luego, si esperan pinturas clásicas con escenas religiosas, quedarán defraudados. ARCO ha apostado este año por abrirse al arte internacional. Esta apuesta, arriesgada a todas luces, ha traído a la feria un catálogo amplio y rico en matices.

Eso sí, algunos matices artísticos escaparán al entendimiento de muchos visitantes. En ARCO se busca impresionar mediante la abstracción, buscando siempre una distorsión extrema que no de pie alguno a la indiferencia.

Muchos lo consiguen y son aplaudidos por ello, otros se quedan en el camino. Y es que apostar por llamar arte a una máquina de chucherías, a un excalextric o a un PC atravesado por un hacha es arriesgarse a no ser entendido por la mayoría.

Más allá del tufillo elitista que puede desprender ARCO en algunas zonas de Ifema, el visitante puede echar un buen rato contemplando cosas que verdaderamente llaman la atención del más pasmado. No en vano, el Rey no puedo evitar interesarse por una silla robótica expuesta en el pabellón 9. Un interés que se despierta en el visitante prácticamente a cada metro. Muchas son las galerías, los estilos y los autores y todos, diferentes. Uno va caminando y de repente se para frente a una casa hecha de...¡cajas de fruta! Prosiguiendo con el paseo el asombro no se queda ahí y uno puede casi chocarse con una escalera que no llega a ninguna parte o con una sirena tumbada en medio de un desierto.

Motos hechas de cartón, tiburones que se proyectan en el aire sin más ayuda que un foco de luz, globos que flotan sobre decenas de cuchillos que amenazan con hacerlos estallar, vídeos con personajes que simplemente se dedican a explotar pompas de jabón...Esto es ARCO, arte que roza el delirio, sin barreras de ningún tipo, libre de interpretaciones y de estilos. Para dejarse sorprender tienen hasta el lunes. La entrada general para el público tendrá un coste de 30 euros, incrementándose a 60 euros si además, se incluye el catálogo oficial. El precio para los estudiantes será de 20 euros.
¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (2)    No(0)

+
0 comentarios