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IA y digitalización: ¿las nuevas tecnologías suponen una amenaza para la sostenibilidad?

IA y digitalización: ¿las nuevas tecnologías suponen una amenaza para la sostenibilidad?
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(Foto: Gerard Siderius / Unsplash)
Por Agencia
jueves 15 de agosto de 2024, 11:22h

La revolución digital tiene el potencial de cambiar el mundo de manera profunda. Con la introducción de nuevas tecnologías como la inteligencia artificial (IA), los macrodatos y la digitalización, se han logrado enormes avances en muchos ámbitos de la vida.

Estas tecnologías ofrecen oportunidades para aumentar la eficiencia, mejorar la calidad de vida e innovar. Sin embargo, a pesar de estos beneficios, existe la preocupación legítima de que estas tecnologías también puedan poner en peligro la sostenibilidad.

Digitalización y huella ecológica

La digitalización ha provocado un aumento exponencial del procesamiento de datos. La huella digital creada por el uso de servicios en la nube, plataformas de streaming y redes sociales contribuye a la contaminación ambiental. Almacenar y transferir grandes cantidades de datos requiere una cantidad significativa de energía. Las granjas de servidores y los centros de datos que procesan estos datos no solo consumen energía, sino que también generan calor que requiere medidas adicionales de refrigeración. La huella ecológica de la digitalización es, por tanto, un reto importante para la sostenibilidad.

Un ejemplo concreto del consumo de energía de las actividades digitales son los juegos de casino en línea, como el video poker, las compras en línea y los juegos de azar. Estas actividades también requieren importantes cantidades de electricidad para los servidores que alojan los juegos y procesan los datos. Sin embargo, es importante señalar que la huella energética de los servicios en línea puede ser a menudo más favorable en comparación con las alternativas tradicionales locales.

Por ejemplo, realizar transacciones digitalmente y operar servidores puede ser potencialmente más eficiente desde el punto de vista energético que mantener locales comerciales e infraestructuras físicas. Es crucial tener en cuenta este equilibrio y prestar atención a cómo se evalúan las opciones digitales y locales en términos de su impacto medioambiental.

Las tecnologías inteligentes basadas en la digitalización ofrecen numerosas oportunidades para conservar recursos. Las redes inteligentes basadas en la tecnología digital permiten una distribución y un uso más eficientes de la energía. Los sistemas agrícolas inteligentes utilizan sensores digitales y análisis de datos para optimizar el uso del agua, los fertilizantes y los pesticidas. Estas tecnologías contribuyen a reducir el consumo de recursos y minimizar la huella ecológica de la agricultura.

La inteligencia artificial y su impacto en el medio ambiente

La inteligencia artificial es un área clave de la digitalización que ha permitido enormes avances. Sin embargo, el consumo de energía de los sistemas de IA es una de las principales preocupaciones. Los procesos de entrenamiento de modelos complejos de IA, especialmente en el ámbito del aprendizaje automático y las redes neuronales, requieren considerables recursos informáticos, lo que conlleva un elevado consumo de energía.

Los estudios han demostrado que el entrenamiento de un modelo de IA de gran tamaño puede ser comparable al consumo de energía de varios hogares durante un período de meses. Este elevado consumo de energía contribuye a las emisiones de CO₂, que aumentan el calentamiento global.

Además del consumo de energía, también preocupan el consumo de recursos y la producción de residuos asociados a la IA. La producción y eliminación de centros de datos, servidores y otros componentes de hardware requieren valiosas materias primas, incluidas tierras raras. La producción y eliminación de estos componentes puede ser perjudicial para el medio ambiente, especialmente si la gestión de residuos no está debidamente regulada. El reto es ampliar el ciclo de vida del hardware y mejorar los métodos de reciclaje para minimizar la huella medioambiental.

En el lado positivo, la IA también puede contribuir a mejorar la sostenibilidad. Utilizando la IA para optimizar los procesos, las empresas pueden reducir su consumo de energía y utilizar los recursos de manera más eficiente. Por ejemplo, la IA puede ayudar a optimizar el consumo de energía en los edificios mediante sistemas de control inteligentes o mejorar el flujo de tráfico en las ciudades para reducir las emisiones. Estas aplicaciones demuestran que la IA ofrece tanto retos como oportunidades para la sostenibilidad.

Retos y riesgos para la sostenibilidad social

La digitalización y el uso de la IA pueden exacerbar las desigualdades sociales existentes. La brecha digital, la diferencia entre los que tienen acceso a las tecnologías digitales y los que no, es un problema importante. Las personas sin acceso a la tecnología moderna y a los servicios de Internet tienen menos oportunidades de educación, desarrollo profesional y participación en la economía digital. Esto puede acentuar la brecha entre las comunidades acomodadas y las de bajos ingresos y poner en peligro la sostenibilidad social.

El progreso tecnológico, especialmente a través de la automatización y la inteligencia artificial, repercute en el mercado laboral. Muchas actividades manuales y rutinarias están siendo sustituidas cada vez más por máquinas, lo que puede provocar la pérdida de puestos de trabajo. Aunque las nuevas tecnologías también crean nuevos empleos, existe la preocupación de que los trabajos asociados a menudo requieran cualificaciones superiores que no todos los trabajadores poseen. Esto puede dar lugar a un desajuste entre las cualificaciones de la mano de obra y las demandas del mercado y agravar los retos sociales.

Otro riesgo social asociado a la digitalización y la IA es la protección de la privacidad. La recopilación y tratamiento de grandes cantidades de datos personales por parte de las plataformas digitales y los sistemas de IA plantean cuestiones sobre la protección de datos. El uso indebido de los datos y una regulación inadecuada de la protección de datos pueden socavar la confianza pública en las tecnologías digitales y dar lugar a importantes problemas sociales y éticos.

Oportunidades para el desarrollo sostenible a través de la tecnología

A pesar de los retos, las nuevas tecnologías también ofrecen importantes oportunidades para el desarrollo sostenible. La innovación en energías renovables, como la tecnología solar y la energía eólica, está siendo impulsada por las tecnologías digitales y la IA. A través de análisis de datos precisos y sistemas de control inteligentes, las fuentes de energía renovables pueden utilizarse de manera más eficiente, lo que lleva a una reducción de la dependencia de los combustibles fósiles.

Tecnologías como el Internet de las Cosas (IoT) y blockchain pueden ayudar a promover la economía circular creando transparencia en las cadenas de suministro y optimizando los procesos de reciclaje. Los sensores IoT pueden ayudar a supervisar el estado de los productos y prolongar su vida útil, mientras que la tecnología blockchain proporciona un registro inmutable de materiales y productos que facilita el reciclaje y la reutilización.

Los medios digitales desempeñan un papel crucial en la educación y sensibilización sobre cuestiones de sostenibilidad. Las plataformas en línea, las redes sociales y los recursos educativos digitales permiten informar a un amplio público sobre cuestiones medioambientales y prácticas sostenibles. La difusión de conocimientos y la promoción de comportamientos respetuosos con el medio ambiente son cruciales para reforzar el apoyo social a las iniciativas sostenibles.

Conclusión

La inteligencia artificial y la digitalización ofrecen tanto retos como oportunidades para la sostenibilidad. La tecnología tiene el potencial de reducir el impacto medioambiental y aumentar la eficiencia en diversas áreas. Al mismo tiempo, sin embargo, también alberga riesgos como el elevado consumo de energía, el agotamiento de los recursos y las desigualdades sociales. A la hora de aplicar nuevas tecnologías, es crucial mantener un equilibrio entre los avances tecnológicos y las responsabilidades medioambientales y sociales.

El desarrollo y la aplicación de tecnologías deben realizarse siempre teniendo en cuenta su impacto sostenible. La innovación y los avances tecnológicos deben complementarse con prácticas responsables para garantizar que las soluciones digitales y basadas en IA allanen el camino hacia un futuro más ecológico y justo. Solo mediante enfoques integradores y un planteamiento consciente de los desafíos podrá aprovecharse el potencial de la digitalización y la IA para el desarrollo sostenible.