Estados Unidos está viviendo una fuerte tormenta invernal, denominada Tormenta Elliot, que está complicando mucho el inicio de las Navidades.
Desde Canadá hasta Texas se han sucedido múltiples nevadas y heladas que han provocado ya la muerte de 22 personas. Una cifrá que podría ir aumentando en las próximas horas y días, pues los destrozos son cuantiosos.
Este fenómeno meteorológico se ha producido dedbibdo a una bomba ciclónica causada por un frente de aire ártico. Una situación que según los meteorólogos está empezando a remitir, pero que todavía tiene el país en unas temperaturas extremas.
Y es que en la víspera de Navidad los termómetros se desplomaron, nevó de forma copiosa en multitud de zonas y hubo fuertes rachas de viento. Más de 300.000 hogares se quedaron sin luz y la Agencia Estatal de Meteorología puso en alerta a más de 200 millones de personas.
Las nevadas pillaron a muchos en la carretera debido a las fechas en las que muchos viajan para ver a familiares o amigos. Algunos de los fallecidos lo hicieron a causa de verse atrapados en sus vehículos durante la fría tormenta.
Más de 10.000 vuelos cancelados
Parece que la situación va a mejorar a lo largo de las próximas horas a medida que el frente avance hacia el este, pero a su paso sigue provocando consecuencias devastadoras.
Sin luz, sin calefacción, carreteras instransitables...Un caos que se ha trasladado a muchos aeropuertos desde mediados de semana. Solo el jueves se cancelaron más de 6.000 vuelos ante las difíciles condiciones y el día de Nochebuena más de 4.000
Los termómetros han llegado a marcar 20 grados bajo cero en algunas ciudades.