La capitana del 'Sea-Watch 3', Carola Rackete, ha sido detenida en Lampedusa tras atracar en un puerto italiano con más de 40 náufragos rescatados a bordo.
Después de 17 días navegando en el Mediterráneo sin autorización para atracar en puerto y 60 horas después de que decretaran el estado de emergencia a bordo sin obtener respuesta alguna, la capitana del 'Sea-Watch 3', Carola Rackete, llevó su buque hacia aguas territoriales italianas pese al veto del gobierno de Mateo Salvini.
Una vez llegados a puerto, las autoridades procedieron a su detención y Rackete podría enfrentarse a una pena de hasta 10 años de prisión si prosperan las acusaciones en su contra relativas a su resistencia frente a un barco de guerra, según la televisión estatal RAI.
El 'Sea-Watch 3' atracó con más de 40 náufragos rescatados a bordo porque la prioridad era ponerlos a salvo "antes de que ocurriera algo irreparable a bordo", tal y como explicó la portavoz de la organización, Giorgia Linardi. Asimismo, Linardi ofreció la "máxima cooperación" de la entidad en relación a la investigación y 'Sea-Watch 3' insiste en que Rackete se ha limitado a cumplir con las leyes internacionales de navegación que obligan a llevar a los náufragos al puerto seguro más cercano.
A bordo del buque de rescate se encontraban asimismo varios parlamentarios de izquierda italianos, entre los que se encontraba incluso un ex ministro.