La aprobación del proyecto estrella de Emmanuel Macron, la reforma de las pensiones, ha sumido a Francia en una oleada de protestas en todo el país.
Gran parte de la sociedad rechaza de lleno el aumento de la edad de jubilación y miles de personas han salido a las calles. La norma tiene en contra a todos los sindicatos y a parte de la oposición del Gobierno.
Pese al rechazo, el presidente galo sigue adelante con su iniciativa, aunque las protestas han llegado a tal magnitud que ha pospuesto una visita del rey de Inglaterra.
Carlos III no viajará finalmente el día 28 a Francia como estaba previsto a petición del propio Macron.
Una visita muy esperada
La visita del rey de Inglaterra estaba marcada en rojo en el calendario, pues iba a ser el primer viaje al extranjero del nuevo rey.
El viaje iba a durar 3 días y estaban previstos varios actos en París y Burdeos, según ha confirmado RTVE, pero finalmente se ha tenido que aplazar.
Una especie de 'puesta de largo' del monarca inglés que además iba a tener mucho peso simbólico, pues se abogaba por aprovechar la visita para recortar distancias tras el Brexit y protagonizar un acercamiento.
El rey no podrá viajar a Francia pero sí ha mantenido su agenda para viajar a Alemania, que era el siguiente destino europeo.
La tensión aumenta en Francia
La reforma se aprobó el pasado lunes y ahora todos están pendientes del dictamen del Consejo Constitucional, por lo que las manifestaciones y protestas se han incrementado.
Marchas en contra por todo el país, especialmente en las principales ciudades. Cientos de personas han sido detenidas y la violencia y los disturbios ha acaparado parte del protagonismo, pero la población no se rinde y siguen saliendo a las calles a protestar: