El periodista español Pablo González, encarcelado durante más de 2 años en Polonia por espionaje y liberado en agosto de 2024 en un intercambio de prisioneros con Rusia, defiende su inocencia en una carta que publica este domingo el diario Gara y asegura que las acusaciones contra él "no tienen nada que ver con espionaje".
González, que tiene nacionalidad rusa y española, y residía en Gernika con su mujer y sus 3 hijos, fue detenido en la frontera de Polonia con Ucrania pocos días después de la invasión de Rusia, en febrero de 2022, acusado de formar parte del GRU (servicio secreto ruso).
Según afirma, esas acusaciones "no tienen nada que ver con espionaje, sino con el simple ejercicio del periodismo, en especial del periodismo de investigación".
En la misiva que ha dirigido al periódico vasco, señala que le intercambiaron sin juzgarle, "sin leer las actas ni investigar realmente nada" y que le han condenado "de manera oficiosa, ya que oficialmente no han podido hacerlo".
Destaca que el hecho de que fuera recibido por el presidente ruso, Vladímir Putin, tras su liberación, parece que es "la prueba absoluta" de su culpabilidad, cuando el periodista estadounidense intercambiado fue recibido por el entonces presidente estadounidense, Joe Biden, y por "altos representantes de los servicios secretos de su país".
El Tribunal de Distrito de Varsovia anunció a principios de este mes la suspensión del proceso penal contra González al estimar que tras su liberación es poco probable que comparezca de manera voluntaria.
Acusado por la hija de un opositor al Kremlin
En septiembre de 2024, poco después de la liberación de Pablo González, la activista rusa Zhanna Nemtsova reveló a la 'BBC' que el periodista vasco la espiaba al seguir sus pasos, asistía a eventos de su círculo y grababa entrevistas.
Nemtsova es hija de Boris Nemtsov, un acérrimo opositor de Vladímir Putin, que fue asesinado en 2015 cerca del Kremlin.
El año pasado Nemtsova dijo que recibió pruebas de la actividad de González como parte de la investigación criminal, por lo que no tiene "ninguna duda de que era un espía. Estoy segura al 100%".