Cientos de miles de personas (más de medio millón, según los organizadores) recorrieron el sábado las calles de Washington en la denominada Marcha de las Mujeres, convocada para protestar contra lo que consideran una previsible regresión de las políticas de género, si se toman en consideración las declaraciones machistas de Donald Trump a lo largo de su campaña electoral.
La multitudinaria muestra de rechazo se produce, según destacan todos los diarios, sólo un día después de la investidura del nuevo mandatario estadounidense, jornada en la que también se produjeron protestas, algunas de carácter violento, que provocaron finalmente más de 200 detenciones. La marcha que comenzó en la avenida de la Independencia, cerca del Capitolio, discurrió en esta ocasión de forma pacífica, y contó con la presidencia de destacadas dirigentes feministas, como Gloria Steinem, actrices como Scarlett Johansson, Ashley Judd, America Ferrera, Kristen Stewart (Crepúsculo) y Melissa Benoist (Supergirl), cineastas como Michael Moore, artistas como Madonna y otras muchas caras conocidas participaron en la protesta junto a activistas políticos, como Ilyasah Shabazz, hija del líder de los derechos civiles Malcolm X.
También políticos como Bernie Sanders o la aspirante a la Casa Blanca, Hillary Clinton, expresaron su apoyo a través de las redes sociales. "Esperanza, no miedo", puntualizó la ex candidata demócrata para animar a los manifestantes.
Janelle Monae, Maxwell, Indigo Girls y Madonna actuaron para la cita anti-Trump de este sábado, después de que el ámbito de la Cultura diera la espalda al presidente rechazando casi en bloque el 'honor' de actuar en su proclamación.