Horas después de que Donald Trump confirmara su victoria en las elecciones de Estados Unidos, Kamala Harris reconoció públicamente su derrota en un emotivo discurso que pronunció en la Universidad de Howard, en Washington, frente a miles de simpatizantes.
Aunque los rostros reflejaban inquietud y decepción por el incierto futuro que aguarda al país, los seguidores de Harris acudieron para mostrar su apoyo a la candidata demócrata.
Harris, por su parte, trató de transmitirles un mensaje de esperanza: “Aunque admito la derrota en las elecciones, no admito la de la lucha que ha alimentado esta campaña. La lucha por la libertad, por la justicia, por la dignidad, la lucha por los ideales en el corazón de nuestra nación: esa es una lucha que nunca voy a abandonar".
We must accept the results of this election.
Earlier today, I spoke with President Trump and congratulated him on his victory. I told him that we will help him and his team with that transition, and we will engage in a peaceful transfer of power.
A lo largo del acto, y en medio de aplausos y algunos cánticos, la vicepresidenta recibió el respaldo de sus seguidores en un ambiente que en principio estaba planeado para una celebración de victoria, la cual no llegó a materializarse. "Debemos aceptar los resultados de las elecciones", señaló este miércoles con voz entrecortada, tras explicar que momentos antes había telefoneado al presidente electo -quien fue abucheado por los asistentes- para "felicitarle por su victoria y comprometernos a realizar una transición pacífica del poder”.
En su discurso, Harris lanzó una crítica indirecta a su adversario, recordando que en 2020 Trump no aceptó su derrota ante Joe Biden. "Un principio fundamental de la democracia estadounidense es que, cuando perdemos unas elecciones, aceptamos los resultados. Y cualquiera que busca la confianza pública, debe honrarlo", dijo, y añadió: "En nuestra nación, somos leales no a un presidente ni a un partido, sino a la Constitución de los Estados Unidos".
Sus motivos de lucha
Durante su intervención, la vicepresidenta se refirió también a temas clave como la defensa del derecho al aborto, el control de armas y la reducción de la violencia. Consciente de que los republicanos ahora dominan el Senado, lo que implica que el partido demócrata ha perdido la mayoría en las instituciones federales, Harris enfatizó que continuarán defendiendo sus ideales "con el voto, en los tribunales y en la plaza pública".
Dirigiéndose especialmente a los jóvenes presentes, quienes representaban una parte significativa de la audiencia, Harris intentó infundirles ánimo en estos momentos de adversidad. “Todo va a ir bien. Cuando luchamos, ganamos, pero a veces la lucha lleva tiempo. Eso no significa que no vayamos a ganar al final; lo importante es que nunca te rindas. Nunca dejes de intentar que el mundo sea un lugar mejor", concluyó.