Tras 38 días en el hospital Policlínico Gemelli de Roma, el Papa Francisco recibió el alta médica y dio esperanza a la comunidad católica.
También a un Vaticano que ya se preparaba para lo peor, activando discretamente un protocolo para un posible proceso de sustitución ya fuera temporal o definitivo, con un nuevo Cónclave por fallecimiento del Sumo Pontífice.
Pero el argentino Jorge Bergoglio pudo superar su pulmonía bilateral e incluso saludó a los fieles desde la clínica, dando un mensaje de calma, eso sí, pese a la frágil imagen de salud que proyectó.
Palabras a sus fieles
“¡Gracias a todos!”, dijo el santo padre de Roma al asomarse a la ventana del Policlínico Gemelli. Sus fieles, allí congregados, le esperaban con emoción y durante todo el tiempo de su hospitalización se concentraron en la calle cercana para rezar por él y apoyarlo.
Francisco se asomó al balcón de la clínica antes de abandonarla, y bendijo a las 3.000 personas congregadas en la explanada del lugar, que le aplaudieron y gritaron su nombre.
El Papa se fijó especialmente en una de sus fieles, la anciana Carmela Mancuso, de 72 años, quien desde primera fila le dedicaba un ramo de flores amarillas. Francisco le dedicó unas palabras: "Veo a esta señora con las flores amarillas! ¡Es buena!".
Antes de asomarse al balcón del hospital, Francisco saludó al personal y a la alta dirección de la Universidad Católica y del Policlínico Gemelli: el rector de la Universidad Católica del Sagrado Corazón, la profesora Elena Beccalli; el presidente de la Fondazione Policlínico Universitario Agostino Gemelli IRCCS, el doctor Daniele Franco; también el decano de la Facultad de Medicina y Cirugía de la Universidad Católica, el profesor Antonio Gasbarrini; el vicepresidente de la Fundación, Giuseppe Fioroni; el director general, Marco Elefanti; el asistente eclesiástico general de la Universidad, monseñor Claudio Giuliodori; y el profesor Sergio Alfieri, director del Departamento de Ciencias Médicas y Quirúrgicas del Policlínico Gemelli y jefe del equipo médico del Gemelli y el director médico de la Fundación del Policlínico Gemelli, Andrea Cambieri.
Francisco y su salud
El Papa arrastraba problemas de salud desde las navidades, y recientemente suspendió una misa por sus problemas a la hora de hablar y respirar debido a su bronquitis. En 2023 padeció una fuerte pulmonía.
Francisco, actual papa de la Iglesia católica, tiene ya 88 años y presenta problemas de salud crónicos. En su juventud, una enfermedad hizo que fuese sometido a una operación quirúrgica en la que le fue extirpada una porción de pulmón.
Desde hace tiempo se especula con una posible retirada por ese delicado estado físico, ya que muchas veces tiene que ser llevado en silla de ruedas o caminar con bastón por sus problemas de rodilla.
Además, en 2023 fue operado de la pared abdominal por una hernia. Además, en 2021, se le extirpó una pequeña parte del colon.
Otro problema habitual en Francisco es su nervio ciático, que le provoca fuertes dolores, conocidos popularmente como 'ciática'.