El presidente francés Emmanuel Macron pretende llevar a cabo una gran reforma de las pensiones que, entre otros puntos, modificará la edad mínima de jubilación de 62 a 64 años en 2030.
También plantea elevar a 43 años las cotizaciones para poder disfrutar de una jubilación completa y elevar la pensión mínima a 1.200 euros al mes.
La reforma lleva tiempo en la hoja de ruta del presidente, pues no pudo hacerla en su primer mandato y está tratando de que salga adelante ahora.
El objetivo es lograr "un mayor equilibrio" del sistema, argumentan desde el Ejecutivo, pero una gran parte de la población rechaza de lleno la medida y miles de franceses han salido a protestar a las calles en una jornada de huelga muy seguida.
El centro de París se llena de protestas
En todo el país se han convocado manifestaciones y protestas por la reforma del sistema de pensiones, pero en la capital francesa es donde se han producido las concentraciones masivas.
Los sindicatos han cifrado en más de medio millón de asistentes, algunos incluso apuntan a cerca de un millón de manifestantes.
Las manifestaciones estaban calificadas de alto riesgo y el Ejecutivo ha desplegado un amplio dispositivo policial. De momento no han trascendido incidentes graves aunque los agentes han tenido que emplear gases lacrimógenos en algunos momentos contra ciertos grupos de manifestantes. Por el momento reportan 30 detenidos.
Si nada en la agenda lo impide, el próximo día 23 llegará el asunto al Consejo de Ministros.
Macron defiende los cambios como "justos" y advierte de que Francia "va con retraso" respecto a la edad de jubilación en otros países europeos.