Las imágenes de televisión captaron en directo el intento de magnicidio de la vicepresidenta argentina, Cristina Fernández de Kirchner, que sobrevivió sin sufrir ningún daño.
La mandataria estaba entrando en su domicilio de Buenos Aires el jueves por la noche frente a una multitud, que la recibía para apoyarla en medio de un clima de agitación política en el país.
Fernández, tras bajar del coche oficial, se acercó a la acera para saludar a sus seguidores. De repente, un joven se le acercó entre las decenas de personas congregadas, se hizo paso y puso un arma frente a su cabeza. Aunque apretó el gatillo, no salió ninguna bala de la pistola.
Se sabe que es un joven brasileño de unos 34-35 años y con antecedentes por posesión de armas. Se supone que era una activista contra Fernández de Kirchner y que ya había realizado discursos de odio contra la actual vicepresidenta y ex presidenta del país.
Tras investigarse si tenía intención de matarla o no, se ha concluido que el arma falló al encasquillarse. La pistola contenía balas, en concreto 5.
Según declaró el ministro de Seguridad del país, Aníbal Fernández, ahora se evaluará la "capacidad y disposición que tenía esta persona" para asesinar a la vicepresidenta.
El presidente argentino, Alberto Fernández, reaccionó a la noticia y consideró "de una gravedad institucional y humana extrema" que hayan intentado asesinar a la vicepresidenta cuando llegaba a su casa, en medio de una multitud de seguidores.
Cristina Fernández, de 69 años, está acusada de varios delitos de corrupción fruto de su etapa como presidenta de Argentina, cargo que ostentó entre 2007 y 2015. Había sustituido en el puesto a su marido, Néstor Kirchner, quien falleció 3 años después, en 2010
Condenamos el cobarde intento de magnicidio en contra de nuestra hermana @CFKArgentina. Toda nuestra solidaridad a la vicepresidenta. La Patria Grande está contigo hermana. La derecha criminal y servil al imperialismo no pasará. El pueblo libre y digno de #Argentina la derrotará. pic.twitter.com/oKQe5oI2BZ
El intento de asesinato a la vicepresidenta de Argentina, Cristina Fernández, merece el repudio y condena de todo el continente. Mi solidaridad con ella, el Gobierno y el pueblo argentino. El camino siempre será el debate de ideas y el diálogo, nunca las armas ni la violencia.