Sri Lanka es uno de los países más empobrecidos y la ciudadanía ha estallado ante la actual crisis económica que atraviesa el país. Miles de personas han salido a las calles a exigir la dimisión del presidente Gotabaya Rajapaksa y la situación ha acabado por colapsar del todo cuando varios grupos han asaltado la residencia del mandatario en Colombo.
Según la información que ha trascendido, el presidente se encuentra en paradero desconocido, pero los manifestantes siguen en las calles y se ha desatado una auténtica batalla. Las autoridades han cifrado hasta ahora 33 heridos, 2 de ellos muy graves, aunque los incidentes siguen y es probable que el número de víctimas aumente.
La población del país lleva meses protestando contra la gestión económica del país, pues les ha abocado a la myor crisis desde su independencia de Reino Unido.
El primer ministro ofrece su dimisión y un nuevo Gobierno para calmar los ánimos
En medio de la espiral de protestas, el primer ministro, Ranil Wickremesinghe, ha anunciado que ofrece su dimisión para calmar a la ciudadanía así como la creación de un nuevo Gobierno de unidad nacional.
Acepta así la recomendación de la oposición, que instaron en el Parlamento a que dimitiese y se iniciase el proceso para formar un nuevo gobierno.
Fuentes cercanas al presidente han indicado a los medios locales que aunque ahora se encuentra en paradero desconocido, aceptará lo que acuerde su primer ministro y los partidos de la oposición.