Francia desempeña un papel muy especial en esta crisis independentista catalana. Primero, por ser un país esencial en Europa, concretamente el segundo motor económico de la Unión. Pero, segundo, porque es un país vecino con una larga tradición en sus relaciones no sólo con España, sino también con la sociedad catalana.
El 'no' rotundo que ha dado este lunes el Gobierno de Francia, comandado por el primer ministro Édouard Philippe, a las órdenes del presidente Emmanuel Macron, era el apoyo rotundo que tanto buscaba el Gobierno de Mariano Rajoy.
Y es que después de las tibias palabras de otros ejecutivos como el alemán, aludiéndose sólo a la legalidad, este pronunciamiento de Francia supone un rapapolvo a Puigdemont y sus allegados, que están dudando a última hora sobre si declarar o no de manera unilateral la independencia o, bien, hacer una declaración simbólica sin validez política.
En concreto, esas declaraciones en la cadena de televisión 'CNews' han llegado en boca de Nathalie Loiseau, secretaria de Estado de Asuntos Europeos de Francia. Loiseau ha dejado bien claro que una declaración unilateral de independencia en Cataluña "no sería reconocida" en caso de que esta semana se produzca en el Parlament.
Y es más, ha pronunciado otra frase que también necesita escucharse en Madrid para sentenciar la locura soberanista: "La primera consecuencia sería automáticamente la salida de la Unión Europea".
Otras voces en contra desde Francia y el extranjero
Por su parte, también en declaraciones a la prensa, Manuel Valls, el ex primer ministro francés nacido en Cataluña, dijo ayer que "deshacer España como nación es deshacer Europa" y que el intento de independencia es "una locura". "España, y la fuerza de España, es tener regiones fuertes como Cataluña y el País Vasco", explicó.
En la prensa internacional, la manifiestación masiva de ayer domingo en Barcelona en contra de la independencia, abrió incluso algunos diarios, como el francés 'Le Monde', que titulaba: "Una inmensa marea rojigualda en Barcelona contra la independencia". También se veía esta marcha en la portada del 'New York Times', que decía: "Miles de personas protestan en Barcelona contra la independencia". También se le puede ver este tema en la portada del británico 'The Guardian': "Carrera contra la independencia de miles de personas en Barcelona".