Conocida la decisión de la Reserva Federal de mantener los tipos invariados en el 0,5%, ahora los mercados tienen la atención puesta en la reunión del 14 de diciembre. En noviembre, el día 2, la Fed también tiene reunión del Comité de Politica monetaria, pero en vísperas de las elecciones presidenciales norteamericanas del día 8 de noviembre, parece muy improbable que la Fed modifique la política monetaria en esa reunión. Por lo tanto, lo más probable es que sea en la reunión de diciembre cuando la Fed pueda subir los tipos de interés, siempre y cuando la economía estadounidense mantenga el ritmo actual. Entramos por lo tanto en un periodo de doce semanas en las que los datos económicos norteamericanos van a ganar protagonismo. Si son positivos, las expectativas de una subida de tipos hasta el 0,75% se incrementarán. Si por el contrario son negativos, se moderarán y los mercados retrasarán la expectativa de subida al año 2017. En algún momento la Fed, al igual que hizo en diciembre de 2015, tendrá que tomar la decisión de incrementar los tipos de interés en 25 puntos básicos, y mostrar el convencimiento de que la economía estadounidense mejora de forma sostenida. Los datos económicos también tendrán influencia sobre el dólar y mientras se mantenga la expectativa de subida de tipos en diciembre, también podría favorecer una apreciación gradual del dólar, aunque en su evolución aunque cualquier noticia no esperada en relación a la carrera presidencial norteamericana podría alterar el escenario.