Un día después de que lo hiciese la FED, el BCE publicaba ayer las actas de su última reunión. Las actas muestran que las autoridades del BCE debatieron en su reunión del mes pasado un aumento menor en las compras de bonos y acordaron adelantarlas este trimestre a condición de que se reduzcan más tarde si las circunstancias lo permiten.
Preocupados por la posibilidad de que un aumento de los rendimientos haga descarrilar una eventual recuperación, la institución monetaria decidió en marzo aumentar significativamente las compras de bonos. Las compras mensuales de bonos por 1,85 billones de euros en el marco del Programa de Compras de Emergencia Pandémica (PEPP) aumentaron en más de una quinta parte el mes pasado, lo suficiente para estabilizar los rendimientos nominales de los bonos y hacer que los rendimientos ajustados por inflación hayan vuelto a sus mínimos de principios de año. En este sentido, en las actas se señala que “se subrayó que la flexibilidad incorporada en el PEPP es simétrica, lo que implica que el ritmo de compra podría aumentarse y disminuirse de acuerdo con las condiciones del mercado".
La entidad volverá a revisar el ritmo de las compras en junio. Algunos miembros del comité, como los gobernadores del banco central holandés y austriaco, ya han expresado su esperanza de que el BCE pueda comenzar a reducir las compras en el tercer trimestre, a medida que el ritmo de las vacunas se acelere y la crisis sanitaria disminuya.