Parece suficiente tiempo, pero no. Dos años no han bastado para que Reino Unido y la UE lleguen a un acuerdo sobre el Brexit. El primer ministro británico reiteró ayer que el resultado más probable de las negociaciones comerciales post-Brexit con la UE es que no se alcance un acuerdo, a pesar de que autoridades de la UE apuntan a que se han logrado algunos avances, aunque lentos.
A poco más de dos semanas antes de que Reino Unido complete su salida del bloque, ambas partes están pidiendo a la otra que cambie su posición de negociación para asegurar un acuerdo que rija el intercambio de bienes a comienzos del próximo año. Las negociaciones han incumplido varios plazos y, si bien ambas partes reconocen que se agota el tiempo, no ha habido un claro indicio de que alguna de ellas esté dispuesta a cambiar su posición lo suficiente para lograr avances.
La UE considera que la igualdad de condiciones es crucial para proteger su mercado único, pero Reino Unido rechaza quedar sujeto a cualquiera de las reglas del bloque, después de que el primer ministro prometiese a los votantes el año pasado que "recuperaría el control". Mientras, en Reino Unido la tasa de desempleo volvió a aumentar en el periodo de tres meses hasta octubre y los despidos alcanzaron un nivel récord, ya que las empresas se vieron afectadas por las nuevas restricciones contra la pandemia y se prepararon para el final de las ayudas de protección de empleo del Gobierno, que finalmente se han prorrogado hasta el 2021. Los datos oficiales mostraron que la tasa de paro alcanzó el 4,9% en agosto-octubre, frente al 4,8% del periodo julio-septiembre, la más alta en cuatro años.