Ayer la primera ministra británica se comprometió a luchar por un acuerdo para abandonar la Unión Europea, después una ola de dimisiones haya puesto en peligro su estrategia y su cargo. Apenas 12 horas después de que la primera ministra anunció que su gabinete aceptó los términos del acuerdo preliminar, el ministro para el Brexit, la ministra de Trabajo y Pensiones, un viceministro a cargo también de Brexit y el viceministro para Irlanda del Norte, presentaron su dimisión, a la que también se suma la del vicepresidente de los Conservadores. Un miembro del partido conservador partidario del Brexit dijo ayer en la Cámara de los Comunes "Es matemáticamente imposible aprobar este acuerdo en la Cámara de los Comunes. La dura realidad es que llegó muerto". La hostilidad hacia el plan desde el Gobierno y varios legisladores opositores aumentó el riesgo de que el acuerdo preliminar sea rechazado y Reino Unido abandone la UE el 29 de marzo de 2019 sin una red de seguridad. El resultado final sigue siendo incierto, y los escenarios posibles pasan por una aprobación del plan de la primera ministra; la eventual salida de la primera ministra del gobierno; la salida de Reino Unido de la UE sin alcanzar un acuerdo; o, incluso, un nuevo referendo. Mientras la Canciller alemana dijo que “el peor de los casos, y el más desordenado, es que no haya ningún tipo de acuerdo" y que "hay que ver las alternativas y luego preguntarse: ¿lo que tenemos sirve de base? Espero que sí sirva de base".
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