A golpe de noticias sobre las nuevas ayudas de los gobiernos e instituciones. Así se mueven estos días los mercados, esperando nuevos anuncios. Ayer lo hacían con el anuncio el lunes de la Reserva Federal de una expansión de sus medidas de apoyo a la actividad económica, la liquidez en los mercados y la concesión de crédito a empresas y hogares. Pero cada día hay uno nuevo. En EE.UU. los parlamentarios están cerca de aprobar ayudas para el sector de la aviación por 32.000 millones de dólares.
Estos fondos estarían dirigidos a pagar nóminas. El gobierno español aprobaba ayer un plan de reparto de costes con la banca como parte de las líneas de crédito avaladas por el Estado para ayudar a mitigar el impacto del coronavirus en la economía nacional. Como parte del plan, los avales públicos cubrirán alrededor del 80% de los préstamos impagados por las pequeñas y medianas empresas y los trabajadores autónomos. Y en Italia, el ministro de Economía declaraba que el fondo de rescate de la zona euro, el Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE), debería utilizarse sin condiciones para ayudar a las economías afectadas por la crisis del coronavirus.
Lo cierto es que seguramente se necesitarán aún más medidas y más ayudas. La crisis de salud mundial se está transformando rápidamente en una recesión mundial. Ayer, los indicadores PMI de actividad empresarial en Australia, Japón, Europa y Estados Unidos se hundieron, mostrando una caída récord en marzo.