Con el repunte de la inflación, aumenta la presión sobre el BCE. En Alemania en noviembre los precios al consumo alcanzaron un 5,2% frente al incremento del 4,6% de octubre. En España el IPC aumentó en noviembre al 5,6% dos décimas más que en octubre y alcanza el nivel más alto desde septiembre del año 92.
Al repunte de los precios se suma la incertidumbre sobre la evolución de la pandemia. La Presidenta del BCE señalaba el domingo por la noche en una emisora italiana que “hay una preocupación obvia sobre la recuperación económica en 2022, pero creo que hemos aprendido mucho (…) y las medidas que debemos tomar”. El vicepresidente del BCE reconoció el “alto grado de incertidumbre” y pidió mantener abiertas todas las opciones políticas, pero argumentó que tasas de vacunación mucho más altas debería de ayudar a Europa para poder hacer frente a una mejor gestión de los riesgos.
El Gobernador del Banco de Francia dijo que las sucesivas oleadas de contagio han demostrado hasta ahora ser cada vez menos dañinas y esta nueva, no debería de cambiar demasiado las perspectivas económicas. El Gobernador del Banco de España señalaba ayer en un evento en Madrid que es poco probable que los tipos de interés en la zona euro suban el año que viene o incluso algún tiempo después ya que los riesgos para las perspectivas de crecimiento siguen inclinándose a la baja, y que el BCE debería conservar parte de la flexibilidad de los programas de emergencia de compras de activos.