El presidente de EE.UU. presentará hoy su primer presupuesto completo desde que asumió el cargo en enero. Su gobierno busca impulsar prioridades de inversión en infraestructura, cuidado infantil y otras obras públicas en un esfuerzo de reconstrucción nacional.
Según NYT, Biden pedirá la aprobación de 6 billones de dólares en gastos federales del país para el año fiscal 2022, elevándolo a 8,2 billones de dólares para 2031. Para ello, el presidente piensa costear este mayor gasto con subidas de impuestos, con la perspectiva de que los déficits presupuestarios comenzarían a disminuir en la década de 2030.
Aunque el presidente de EE.UU. puede proponer un presupuesto anual para el gobierno del país, le corresponde al Congreso aprobar proyectos de ley de gastos, y aunque los demócratas tienen la mayoría en la Cámara de Representantes sólo controlan de manera limitada el Senado. Los republicanos critican a Biden por querer la aprobación de billones de dólares en nuevos gastos, lo que lleva a esperar que las discusiones sobre las prioridades serán intensas.
Ayer, los republicanos del Senado presentaron una nueva oferta de gasto en infraestructura por 928.000 millones de dólares en ocho años, aún muy lejos de la última propuesta del presidente estadounidense. El plan representa una contraoferta a la propuesta de la Casa Blanca de 1,7 billones de dólares, que ya recortó más de 500.000 millones de dólares la propuesta original de 2,25 billones de dólares, en un intento de alcanzar un acuerdo.