Si el lunes era el Presidente del BCE el que rechazaba las acusaciones de Estados Unidos de manipulación cambiaria, ayer el gobernador del Banco de Francia y miembro del Consejo de Gobierno del BCE, declaraba que los responsables de elaborar las políticas monetarias deberían evitar hacer comentarios sobre los tipos de cambio y agregó que un código internacional de conducta del G-7 desaconseja las devaluaciones competitivas y hacer declaraciones unilaterales sobre los tipos de cambio. Estas declaraciones son respuesta a las realizadas la semana pasada por el asesor comercial del Presidente de Estados Unidos que dijo que el euro estaba “sumamente infravalorado”. Por otro lado, y en respuesta a la política proteccionista de la nueva administración norteamericana, la ministra de economía alemana, el jefe del sindicato IG Metall y el presidente de la asociación de la industria BDI dijeron en un comunicado conjunto que el proteccionismo es la respuesta errónea a los desafíos que enfrenta el mundo y que Alemania usará la presidencia del G-20 para combatir el proteccionismo económico. Aunque estas declaraciones se hacen bajo el marco global del G-20, también cabe señalar que Estados Unidos se ha convertido en el socio comercial más importante de Alemania al que destina casi un 9% de sus exportaciones impulsando el superávit comercial de Alemania. La ministra dijo “vamos a mantener nuestros principios”, pero que si Estados Unidos realmente pretende aplicar medidas proteccionistas, “entonces debemos contrarrestarlas”.